Lois Pérez Leira - Cubainformación
Seguramente el Comandante Fidel Castro fue uno de los hombres más destacados de la historia de la humanidad. Su capacidad intelectual, su concepción global del mundo y su compromiso con los pueblos que luchan por su dignidad, la soberanía y la paz, lo convirtieron en un importante estadista y referente internacional.
La triunfante revolución cubana a pocas millas de los EEUU, la derrota norteamericana en Playa Girón, el aporte decisivo cubano para derrotar a las fuerzas racistas en Sudáfrica, convirtieron a este pequeño país socialista y a su líder en los abanderados de la lucha antiimperialista, en todos los rincones de la tierra.
A pesar de la expulsión de la OEA, del injusto embargo norteamericano a Cuba, Fidel y su pueblo pudieron resistir siempre y vencer. La demostración contundente han sido los nuevos aires que soplaron y soplan por América latina: La revolución bolivariana, Chile, Bolivia, Nicaragua, Colombia, Brasil etc. Fidel es el continuador de los grandes libertadores de América Simón Bolívar, San Martin, Antonio Sucre, Francisco de Miranda, Bernardo O'Higgins etc.
Es el mejor hijo de José Martí, que fue el autor intelectual según el propio Fidel, de la revolución cubana.
Su desaparición física ya era un hecho eminente y asumido por el mismo Fidel, dejándonos como despedida sus últimos geniales pensamientos escritos. Lo más importante es su obra encarnada en la propia revolución y la influencia que aun sigue ejerciendo en una parte importante de la humanidad. Tengo que reconocer que hoy como aquel 9 de octubre de 1967 que escuche la noticia de que habían asesinado al Che, se me hizo un nudo en la garganta y llore. Me crie y forme al calor del pensamiento de la revolución cubana y me siento hijo de esa revolución. Por ello digo en vos alta. ¡Hasta la victoria siempre mi comandante Fidel Castro!
Por el 13 de agosto
Miguel Ojeda.
Distinción Por La Cultura Cubana. Laureado de la Cultura. Artista de Mérito del ICRT. Miembro de la UNEAC.
Comparto fraternalmente con ustedes poemas de mi poeprosa inédito PATRIMONIAL.
El niño de las estrellas
26 estrellas elegidas,
cavalgando desde siempre:
el antes, el hoy y La Vida.
El niño que nace solo
descubre Historia y Futuro
y se proyecta seguro
sobre Pasados y miedos.
¡ Ya le sigue un pueblo todo
sobre 26 estrellas
que cansadas mucho y poco
esta'n viviendo en La Tierra.!
26 estrellas sabias,
secreto del universo,
derramadas sobre un suelo
y, cual un misterio a gritos,
acompañaron al niño
reescribiendo viejos libros.
Ya no esta' y esta' el niño,
hombre-estrella, infinito,
casi real, o ma's leyenda,
o promesas de guajiros
que escribieron epopeyas.
¡ Una hilera de cometas
se acerca a tanta belleza.!
Ellos lo entienden Todo,
Don Oscuro, casi nada
y el niño canta que canta,
carne y estatua en si' mismo.
¡ 26 estrellas cantan
en la mirada del niño.!
UN YATE EN LA HISTORIA VUELA
Un yate en La Historia vuela,
echa rai'ces, proyecta
de mil siglos La Esperanza,
del agua-cielo, la tierra.
El yate se vuelve pueblo,
canto y danza, cual misterio
de palomas, trigo y rosas,
sueños soñados en sueño.
¡Fecunda El Yate el Futuro,
La Vida brota en su
seno!
PIEDRA HABITADA POR NIÑOS
Monolito ma's que piedra
viene albergando prodigios,
borda historias, pare hijos
que retan a tantas sombras
con su enseñanza de siglos.
Se habla del monolito
en mil Leyendas de niños
que hombres fueron cual misterio
que Silencio canto' a gritos.
Funda Futuro, Esperanza,
danza Vida, sueña Libros.
¡ Luz Interna que le alcanza
para sembrar tanto alivio!
Va al Pasado y se regresa;
desde el Hoy pinta un Mañana
al florecer los caminos.
Con El Tiempo, sin moverse,
se traslada al Infinito.
Un Cielo azul, rojo y blanco
se repite en cada ciclo
de Piedra, Sangre y Simientes
de piedras, rosas y niños.
A veces, siempre, me crean
Canto Piedra, pueblo mi'o.
¡ Tanto Pueblo en cada Piedra,
Tanto Pueblo El Monolito !
¡ Un gran monolito, Piedra
defendida por sus hijos !
MUTACIONES
A mi eterna puerta de cristales,
vestida toda de historias,
Doña Historia llama.
Abro mi puerta, ventanas,
y me muestra humanos siglos
dulces como los besos,
amargos cual cruel olvido.
Lejos, cercanos, niños,
barbudos niños que miro
renacer entre mis manos
mientras mi puerta y ventana
26 soles me plantan
en mi jardi'n de futuros
con azul enrojecido,
al blanco rojo azulado.
Restan ma's viajes de niños,
tan barbudos , a mi lado.
Miguel Ojeda.