Además del estreno en plataformas digitales de su disco Mucho más que Palabras, el guitarrista y compositor Dayron Ortiz prevé realizar un concierto especial en el teatro del Museo Nacional de Bellas Artes, en La Habana. Foto: Cortesía del Fondo de Arte Joven.

Entre las acciones del Fondo de Arte Joven se destaca el apoyo al más reciente disco del músico cubano Dayron Ortiz

Redacción IPS Cuba

La Habana, 11 jun.- El estreno en internet del disco Mucho más que Palabras, del guitarrista y productor musical Dayron Ortiz, dentro de tres días, constituye uno de los primeros resultados del Fondo de Arte Joven (FAJ), tras un año de labor en Cuba.

Esta plataforma de promoción de creadores emergentes y emprendimientos culturales en la nación caribeña eligió el proyecto de Ortiz como uno de los ganadores de la primera convocatoria, el año pasado.

Dedicada a fomentar especialmente creaciones de las artes visuales y la música, la iniciativa ofrece oportunidades y recursos que estimulan la variedad de procesos creativos, el intercambio académico y la necesaria visibilidad del arte joven tanto en el terreno nacional como internacional.

Hasta el momento, más de un centenar de artistas (en formación, graduados y autodidactas), entre los 18 y 35 años de edad, cuenta con el respaldo del FAJ.

Accionar cohesionado

Creado en enero del 2023 por la embajada de Suiza en Cuba y la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación, el FAJ articula la cooperación de múltiples donantes y socios.

Entre ellos se destacan el Comité Internacional para el Desarrollo de los Pueblos, el Centro de Intercambio y Referencia sobre Iniciativas Comunitarias, la Fundación Los Carbonell, la Asociación Habana Clásica y el Programa A Ritmo de Inclusión, financiado por la Unión Europea.

Neida Peñalver, coordinadora general del FAJ, explica que la plataforma “se ha erigido como una vía de gestión estratégica para articular la cooperación de múltiples donantes y socios”.

A la vez, asegura, funciona como espacio inclusivo para la creación, la reflexión y el debate cultural, con incidencia en exponentes del arte joven, los emprendedores, las instituciones y los especialistas.

“En un contexto agudo de migración y crisis económica resulta fundamental viabilizar los procesos que conforman la carrera de un creador en ciernes, como la autogestión de fondos, con los cuales pueden asumir la producción de obras y exposiciones propias”, señala.

Oportunidades para el arte joven

Comenta Ortiz que aplicó a la convocatoria del FAJ con un proyecto de fonograma que homenajea a la importante compositora e intérprete cubana Marta Valdés.

La obra discográfica incluye 10 títulos y “representa un sueño de muchos años hecho realidad”, por el vínculo emocional y profesional que lo une a la cantautora, explica Ortiz.

A juicio del músico, aunque el FAJ “apuesta por el arte joven”, se necesitan más iniciativas como esta “que ayuden al joven creador” en Cuba.

“Hay mucho talento y deseos de hacer; pero no tener acceso a determinadas herramientas que se necesitan para consumar ciertos proyectos nos hacen sentir atados, con muchos obstáculos insorteables”.

No obstante, reconoce que integrantes del FAJ “intentan borrar esos obstáculos”.

Además de expresar su felicidad por el apoyo en la producción del álbum, resalta el acompañamiento durante la campaña de comunicación y el plan de lanzamiento del disco y la promoción del concierto previsto este mes en el Museo Nacional de Bellas Artes.

“Realmente no tengo palabras para agradecer cuánto están haciendo por este proyecto”, resalta Ortiz.

Proyecciones

Impulsar la cultura y la creatividad como vía de transformación social y económica es uno de los objetivos del FAJ.

Al respecto, destaca Peñalver la creación de nuevas redes de contacto que permitan consolidar colaboraciones sostenibles y puentes de intercambio –con vocación de permanencia– entre los proyectos culturales cubanos, las empresas nacionales y extranjeras, en su compromiso con la sociedad.

Según dice, las asociaciones “resultan mutuamente beneficiosas para las partes involucradas, en la búsqueda de un impulso decisivo a la creación artística y a la difusión de la cultura; también para vertebrar planes estratégicos empresariales e indicadores de la gestión responsable de interés y valor corporativo”.

Sostiene, además: “Estas buenas prácticas han hecho posible sumar el sector empresarial suizo en Cuba para impulsar la cultura a través del FAJ”.

Como ejemplo menciona la V Edición del Festival Habana Clásica, que “abrió estas posibilidades de cooperación estratégica, al reunir a un grupo de empresarios culturalmente sensibles, que contribuyeron activamente con recursos financieros y de gestión”.

Para Peñalver, el inicio de la articulación entre el sector empresarial y la cultura en Cuba “significa también una puerta abierta a un futuro estratégico de colaboraciones para el FAJ”.

Especifica que podrán sumarse nuevos donantes de sectores estatales y privados, tanto en la isla como extranjeros, interesados en aportar recursos que ayuden a cofinanciar acciones y aportar “mayores posibilidades de sostenibilidad” al arte joven. (2024)