La Habana, 17 feb (Prensa Latina) Cuba y Bolivia firmaron hoy aquí un convenio de colaboración que permitirá a instituciones de energía nuclear de ambos países unir conocimientos y capacidades productivas para lograr radiofármacos contra el cáncer u otras afecciones.
Fotos: Vladimir Molina Espada
El Centro de Isótopos (Centis), perteneciente a la Agencia de Energía Nuclear y Tecnologías de Avanzada (Aenta) de la nación caribeña, y la Agencia Boliviana de Energía Nuclear (ABEN) consolidaron este acuerdo que permitirá elaborar componentes biotecnológicos que no se hacen en Latinoamérica.
Firma de Convenio de Coopercion Interinstitucional entre Cuba y Bolivia
René Leyva, director del Centis, señaló a Prensa Latina que, con más de 30 años de experiencia en radiofármacos en la institución, esa alianza permitirá “unir la experiencia cubana con las capacidades productivas novedosas bolivianas en pos de desarrollar productos promisorios en la lucha contra el cáncer”.
Por su parte, la directora general de la ABEN, Hortensia Jiménez, expresó que el convenio con Centis está dado a partir de un concepto de complementariedad científica y tecnológica, el cual pretende también acercar a los profesionales bolivianos al conocimiento generado por Cuba en cuanto a radiofarmacia, radioisótopos y la aplicación de la energía nuclear en salud.
“Cuba es un ejemplo de lucha, de soberanía científica para todos los latinoamericanos y para nosotros es muy emocionante ver cómo avanzan, a pesar de los obstáculos, en pos del bienestar del pueblo; encontramos con Centis sinergias para cooperar en la investigación radio farmacéutica, la producción y las áreas clínicas, preclínicas para teranósticos”.
En medicina nuclear, teranóstico se refiere al uso de moléculas específicas (péptidos, agonistas, antagonistas, aminoácidos, análogos, etc.) que marcadas con un radionúclido específico permiten hacer diagnóstico y tratamiento de una enfermedad.
Jiménez resaltó, además, que Centis tiene un gran desarrollo en cuanto a la biotecnología y Bolivia ya cuenta con las capacidades para producir radioisótopos de alta energía y “ahí tenemos trabajo conjunto para elaborar componentes que no se hacen en Latinoamérica”.
“Hemos estado trabajando en grandes proyectos en el sector nuclear: uno en la red de centros de energía nuclear y radio terapia para el cáncer y otras patologías; el centro de investigación nuclear donde pusimos en funcionamiento y operaciones el ciclotrón para la radiofarmacia preclínica, además de un centro de irradiación gamma para la parte agrícola y estamos aún en la construcción del reactor de investigación nuclear”, detalló la experta boliviana.
El Complejo Ciclotrón, instalado en la ciudad de El Alto, ubicada a más de cuatro mil metros sobre el nivel del mar, inició la producción de radiofármacos en 2023 para el diagnóstico altamente especializado del cáncer y patologías neurológicas y cardiológicas.
Con toda esta capacidad, aseveró Jiménez, los tres centros poseen la parte diagnóstica para el cáncer, aceleradores lineales, braquiterapia que permiten que los pacientes puedan de forma gratuita accedan a esa tecnología, a partir del sistema único de salud implementado en Bolivia y también hemos dejado de importar radiofármacos para pasar a producirlos en el país.
Resaltó que Bolivia ha incorporado la tecnología nuclear como una herramienta de desarrollo para la nación. La víspera, la embajadora de Cuba en Bolivia, Elba Rosa Pérez, dijo en exclusiva a Prensa Latina que la salud de ambos países se beneficiará con la firma de un Convenio de Cooperación Interinstitucional entre dichas instituciones.