Foto: Minsap.

Implante coclear, la maravilla que hace brotar los sonidos

Por: Maylín Betancourt Verdecia

Rado Ángulo

Más de 500 niños cubanos han sido beneficiados en Cuba con un implante coclear en las más de dos décadas que tiene de creado el programa nacional enfocado en el tratamiento de sordera severa-profunda, un elemento a tomar en cuenta a propósito del Día Internacional de este procedimiento.

Este mecanismo le permite escuchar a quienes nacieron sordos o con grandes deficiencias auditivas, un costoso proceder capaz de traerles de regreso los sonidos, sobre todo a niños. De ahí la importancia de un logro de esta magnitud en el sistema sanitario cubano.

El implante coclear es un dispositivo de alta tecnología, muy costoso con un precio promedio estimado, sin colocar, entre 18 mil y 20 mil euros. Con un costo sobreañadido de la cirugía valorado en cualquier otro país del orbe entre los 40 mil y 60 mil dólares. Sin embargo, este proceder en Cuba es gratuito, desde el dispositivo hasta el proceso que conlleva el estudio, la implantación y la rehabilitación que puede llegar a abarcar varios años. Pero para Cuba es una prioridad, por lo que significa para los niños con discapacidad auditiva.

Para entender cómo es posible el milagro de hacer brotar los sonidos se debe partir de que este dispositivo sustituye la función del oído interno, por lo tanto, se coloca dentro del oído para realizar su función. Se utiliza en los casos de pérdidas auditivas de severas a profundas que no tengan beneficios con las prótesis convencionales.

Si bien cualquier persona con discapacidad auditiva o sordera que no presente malformaciones del oído interno puede ser candidata a este proceder, a la población infantil se prioriza, en especial antes de los tres años de edad, aunque pueden ser operados hasta los seis y siete años, en dependencia de las patologías de base o si ha usado prótesis auditiva con anterioridad.

En el caso de aquellos niños que hayan usado prótesis y perdieron el resto auditivo que tenían igualmente son candidatos a este proceder.

Vale aclarar que la única emergencia empleada en este programa se aplica a los niños sanos que sufren de Meningo encefalitis bacteriana, quienes pueden perder la audición bruscamente por la acción de las toxinas. Por ello es un protocolo establecido que estos casos antes del alta hospitalaria se les realice  una prueba auditiva para conocer si se afectó esta función.

Cuando un niño llega a ser implantado es porque no existe otro recurso, en cuanto a la habilitación de su sordera. En Cuba cuando un infante requiere este proceder se compran las mejores prótesis a las dos compañías líderes del dispositivo a nivel mundial, por tratarse de un programa priorizado.

Cuando hablamos de una de las obras más costosas, también nos referimos a una de las más impactantes de la Salud Pública cubana, pues solo basta conocer a quienes han sido beneficiados con un implante coclear para darnos cuenta cómo experimentan la sensación de escuchar su propia voz y la de sus seres queridos gracias al Programa de Implante coclear que cual milagro hace brotar la maravilla de los sonidos.