Yudy Castro Morales
Presidencia Cuba
En el balance anual de la Comisión Nacional de Atención al Plan Turquino y la Ruralidad, encabezado por el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz, se insistió en la necesidad de atender, desde un enfoque multisectorial, uno de los programas más humanos de la Revolución
Incrementar los niveles productivos del programa cafetalero, así como del cacao y del coco en las montañas, y mejorar la compleja situación de los viales y del transporte, fueron temas que centraron el debate de la reciente reunión de trabajo anual de la Comisión Nacional de Atención al Plan Turquino y la Ruralidad, encabezada por el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz.
En el encuentro, acontecido en el Palacio de la Revolución, el Jefe de Gobierno subrayó la necesidad de atender, desde un enfoque multisectorial, este noble programa, esencia misma de la Revolución, nacido del ingenio y la profunda visión humanista del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, el 2 de junio de 1987.
Al informar sobre los indicadores productivos del café, rubro que no tuvo un buen comportamiento en 2024, el presidente del Grupo Agroforestal, Diosnel San Loys Martínez, señaló que la principal afectación estuvo asociada a la calidad.
Añadió que el programa cafetalero cuenta con alrededor de 18 000 productores, cifra que ha crecido a partir de la incorporación de jóvenes y mujeres; por tanto, urge organizarse mejor, y trabajar de conjunto con los territorios para obtener resultados superiores en 2025.
En ese sentido, el Primer Ministro indicó analizar en cada municipio, empresa y base productiva, las causas que inciden en los bajos rendimientos, y proponer cómo solucionarlas, pues un país como el nuestro tiene que autoabastecerse.
Al respecto, el vice primer ministro, Jorge Luis Tapia Fonseca, llamó la atención sobre las medidas organizativas y de incentivos previstas, en pos de estimular las producciones, teniendo en cuenta que lo hecho dista sobremanera de las potencialidades.
Sobre el deterioro de los viales y las problemáticas relacionadas con la transportación de pasajeros, abundó el viceministro del Transporte, Luis Ladrón de Guevara, quien puntualizó en las acciones que se realizan para mejorar el servicio en las 513 rutas que hoy operan en las montañas.
El neumático especializado, dijo, que es uno de los problemas principales, ya se encuentra en proceso de concertación y contratación, lo que permitirá recuperar un grupo importante de medios, fundamentalmente los que llegan hasta las escuelas.
Para el presente año, explicó Rafael Alfonso, director de obras Ingenieras del Ministerio de la Construcción, también se prevé el mejoramiento de 79 kilómetros de viales.
Foto: Estudios Revolución
Otro tema de análisis fue la necesidad de incrementar el procesamiento de frutas en las más de 90 minindustrias existentes en el Plan Turquino. A juicio de Jose Carlos Cordovés, director general de Política Industrial, del Ministerio de la Industria Alimentaria, resulta imprescindible transformar la infraestructura tecnológica que está en esos lugares, con el propósito de aumentar las capacidades productivas.
De igual modo, Ovel Concepción Díaz, director de Generación con Fuentes Renovables de Energía, de la Unión Eléctrica, mencionó los avances en el programa de electrificación de viviendas aisladas con sistemas fotovoltaicos. Entre los proyectos en curso, ponderó la rehabilitación de 1 890 sistemas, equivalente al 75%, y en el mes de mayo debe concluir el proceso.
Tras el debate, el Jefe de Gobierno hizo hincapié en la importancia de incrementar las producciones de malanga, plátano, boniato, yuca y hortalizas, que garanticen el autoabastecimiento municipal y el aporte a la provincia; priorizar la entrega de aves semirústicas, la cría de cerdos de capa oscura, y dar seguimiento al estado actual de la contratación y la comercialización.
Entre las prioridades destacó, además, avanzar en la digitalización y conectividad en los municipios montañosos, impulsar la transformación energética, así como continuar ampliando los programas sociales, y la atención a las personas desvinculadas laboralmente y en situación de vulnerabilidad.
Se ha trabajado, reconoció, pero es preciso involucrarnos todos en la búsqueda de soluciones, en medio del complejo escenario que vive el país, para mejorar las condiciones de vida en las comunidades de montaña y zonas de difícil acceso. La Revolución, insistió, se hizo en las montañas, por lo que su salvaguarda resulta estratégica.
Foto: Estudios Revolución