PL.- El Ministerio de Cultura de Argentina y el grupo de teatro infantil La Colmenita en este país sellaron un convenio para fomentar los lazos de amistad y colaboración bilateral que se vienen desarrollando hoy en el ámbito cultural.

Héctor Carballo Hechavarría - Juventud Rebelde - HOLGUÍN.— Como un justo llamado a la reconquista de la saga y de una plaza dentro del panorama cultural nacional acaba de trascender en esta ciudad la convocatoria al XII Festival Internacional de Cine Pobre de Gibara.

Marilyn Bobes - Cuba Contemporánea.- El crítico y menos valorado como excelente novelista Rolando Pérez Betancourt es conocido en Cuba, sobre todo, por su programa televisivo La Séptima Puerta, donde siempre se exhiben películas de innegable valor artístico y de todas las nacionalidades. También por sus agudas apreciaciones volcadas en los artículos del periódico Granma.

Prensa Latina.- El Buena Vista Social Club, una de las agrupaciones cubanas con mayor prestigio a nivel internacional, actuará hoy en The Beacon Theatre de Nueva York, como parte de su Adios Tour por Estados Unidos.

Lester Vila Pereira, especial para CubaSí.- La actriz comparte un valioso método de actuación con los jóvenes bailarines de la compañía de Carlos Acosta. La entrevistamos.

Abdala, un héroe del XXI, por Teatro del Viento.

Norge Espinosa Mendoza - Foto: Claudio Sotolongo - Cuba Contemporánea.- Tras despedirse del calendario el fin de semana, también pasa a ser memoria el 16 Festival de Teatro de La Habana, que desde el 22 de octubre movilizó a los habaneros y a los residentes en otras subsedes del evento hacia los espectáculos que integraron su abultada cartelera. Un esfuerzo considerable de artistas, técnicos, especialistas, funcionarios y personal de apoyo logró que se suspendieran escasas funciones, y que la programación cubriera un gran espectro de tendencias, gustos, estéticas y provocaciones.

Mayte Martín en el Teatro Mella durante el festival Les Voix Humaines. Foto: Ivan Soca.

Iván Soca, Rosana Berjaga - Cubadebate.- Hasta no escucharla cantar, es difícil imaginar toda la sensibilidad que late tras la presencia austera y medidamente seria de Mayte Martín. Tampoco es fácil predecir que será capaz de conmoverte hasta las lágrimas, en un acto que parece ser a cada momento un redescubrimiento de la música, de los sentimientos humanos más viscerales, compartidos con un público tempranamente convertido en cómplice del desgarro.

La Columna