Red Semlac.- Las diversas desigualdades de género existentes entre mujeres y hombres, que se profundizan y perpetúan en situaciones extremas como la de la pandemia de la covid-19, son el hilo conductor de la nueva propuesta del Proyecto Palomas, Casa Productora de Audiovisuales para el Activismo Social.
En la serie de cuatro cortos audiovisuales, de solo tres minutos de duración cada uno, se entrelazan pequeños clips de documentales anteriores de Palomas y se enfatiza en la inequidad que emerge en los contextos de crisis, dijo a SEMlac la realizadora y directora del proyecto Lizette Vila.
“Ahí están los testimonios de las protagonistas, las brechas en la igualdad y la violencia que experimentan mujeres y hombres, la necesidad de que estos últimos no estén ajenos a los afectos y la ternura”, comentó Vila.
A su juicio, los cortometrajes invitan a promover la necesaria reparación en estos tiempos de crisis epidemiológica, desde la resiliencia como un derecho a la vida.
Desde hace seis meses, el gobierno y estado cubanos, así como el sistema de salud pública de la nación caribeña, encabezan la respuesta de contención al nuevo coronavirus SARS-CoV-2, causante de la covid-19.
La pandemia ha cobrado la vida de 87 personas en el país, ha contagiado a más de 2.400 personas y obligado a tomar medidas de aislamiento y restrictivas que, en ocasiones, colocan a personas víctimas de violencia en situaciones de mayor vulnerabilidad.
Fotogramas de los cortometrajes.
Bajo la dirección de Lizette Vila, con la narración de Marcos Herrera y producción del Instituto Cubano del Arte e Industrias Cinematográficos (ICAIC), las obras se estrenarán el próximo 17 de julio, en las plataformas digitales del ICAIC, las redes sociales como Youtube, Twitter, Telegram y Facebook, y otros espacios comunicativos.
De acuerdo con Marcos Herrera García, productor ejecutivo de Palomas, esta iniciativa forma parte de la “Fábrica de felicidad”, una de las líneas en las que trabaja Palomas desde 2012, con el propósito de promover la felicidad no solo como un proyecto de vida concreto, sino como el pleno disfrute de todos los derechos humanos.
“Hagamos públicos los afectos, la solidaridad y la ternura, para movilizar las conciencias de las cubanas y los cubanos, y así acompañar al proyecto social del país”, sostuvo Herrera.
Fotogramas de los cortometrajes
Los cortos llevan el nombre de Fábrica de felicidad: Preludio, Producción de afectos, Producción de solidaridad y Producción de ternura. Según sus realizadores, colocan sobre el debate público la necesidad de demandar y reparar proyectos de vida desde una visión resiliente, dentro de cualquier acontecimiento que impacte culturalmente a una sociedad.
Solo así se puede propiciar un ejercicio pleno de derechos entre mujeres y hombres; garantías articuladas en la Constitución de la República de Cuba, dijo Vila.
Asimismo, sostuvo que la realización audiovisual reflejará en estos productos comunicacionales, con eficacia y democratización del lenguaje para la accesibilidad de diversos públicos, el tema de la igualdad de género como un recorrido esencial para la libertad individual y social, y como un recurso movilizador de participación ciudadana.
La resiliencia es un motivo recurrente en la obra de Palomas. Su último documental, Mujeres… resiliencia, derechos a la vida es un canto a la capacidad de resistir y levantarse ante los obstáculos. A través de testimonios de varias mujeres, Vila concibió un llamado de atención sobre esos sueños personales postergados muchas veces y sobre la determinación de seguir, contra viento y marea, buscando y conquistando la igualdad.