Lissy Villar Muñoz - Revista Mujeres.- Para romper mitos sobre la sexualidad y dialogar sobre la diversidad en las familias cubanas, las especialistas Yamira Puentes Rodríguez, y Ada Caridad Alfonso Rodríguez, expertas del Centro Nacional de Educación Sexual compartieron sus experiencias en un foro debate online, coordinado por esta institución y el periódico Juventud Rebelde como parte de la XIV edición de las Jornadas contra la Homofobia y la Transfobia, a desarrollarse del 4 al 30 de mayo de 2021.

Yamira Puentes Rodríguez, al responder el cometario de una internauta sobre su desacuerdo sobre la inclusión del matrimonio homosexual en el Código de Familias, expresó que las personas tienen “el derecho de considerar que no se apruebe el matrimonio homosexual. Sin embargo, las personas con sexualidades e identidades de género no hegemónicas tienen el derecho de vivir de manera placentera su sexualidad y el ejercicio de todos sus derechos sexuales”.

“Las personas homosexuales tienen que poder ejercer su derecho a la libre elección de pareja, a la intimidad sexoerótica, a disfrutar su vida con la pareja elegida y a la legitimación de esta, como todas las personas en nuestra sociedad tal como se establece en nuestra Carta Magna. Ese ejercicio de derechos de todos y todas, esa garantía de estos derechos, debe ser un principio en nuestra sociedad”, valoró la especialista.

La doctora Yamira Puentes Rodríguez, especialista de segundo grado en Psiquiatría resaltó “que el cuidado de nuestros cuerpos está implícito dentro de los derechos sexuales, y en las mujeres lesbianas que no acuden con regularidad a consulta del Médico de familia o de ginecología y que optan por no expresar la función reproductiva de sus cuerpos puede suceder que no se realicen con la frecuencia esperada el pesquizaje para el diagnóstico precoz de enfermedades”. Esta situación pone en riesgo a dicha población por estar más expuesta a un diagnóstico tardío, insistió la profesora auxiliar del Departamento de Trabajo Comunitario de Cenesex.

“Cada mujer debe hacerse responsable de su cuerpo y de su cuidado, al margen de la orientación sexual que esta tenga”, es uno de los mensajes emitidos por Yamira Puentes.

Expresiones en contra de las uniones entre personas homosexuales y el derecho al aborto también tuvieron espacio en el diálogo establecido entre el Cenesex y la población cubana. Al respecto la doctora Ada Caridad Alfonso Rodríguez insistió que todos los elementos planteados dependen de significados; de los significados que las personas le atribuyen al matrimonio.

“Las parejas se unen no para procrear, se unen porque se interesan en construir un proyecto de vida juntos, con el deseo de perpetuar un vínculo afectivo. En ese proyecto pueden incluirse la tenencia de hijos o no. No se unen por necesidades demográficas, no lo hacen para aportar hijos a la sociedad, la mayoría de las uniones tienen como base el amor y el deseo. Los seres humanos son seres sociales deseantes”, recalcó la experta.

El intercambio digital también contempló experiencias personales. La pregunta de una madre acerca de la percepción de su hijo como una persona trans motivó a las especialistas a considerar que “la identidad de género puede expresarse de disimiles maneras y tiene que ver cómo se siente una persona: como mujer, como varón o una combinación de ambos. Existen personas que se niegan a ser encasillados dentro de una categoría de género (femenino, masculino, trans, intersex…) y rompen las barreras de lo socio culturalmente pautado”.

Al proporcionarle más elementos a la internauta Yamira Puentes Rodríguez subrayó que “su hijo está dentro de estas personas, ha superado lo que socioculturalmente está establecido. Algunos referentes teóricos lo llaman genero fluido, es una persona trans que quiere vivir de manera diferente, utilizando su pene, realizándose una mamoplastia y asumiendo roles de género indistintamente. Es bueno aclarar que en el último Manual Diagnostico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM 5) se decide despatologizar a la transexualidad como una enfermedad mental”.

Al respecto de la construcción de una identidad de género no hegemónica y una orientación sexual no heterosexual, la especialista de segundo grado en psiquiatría insiste que no es una aberración, sino el derecho que cada persona tiene de ser y estar en el mundo. “El papel de la familia es cumplir con la función de educar, amar y acompañar a sus hijos e hijas de forma respetuosa en la construcción de su sexualidad”, reflexionó.