Vladia Rubio - CubaSí/Revista Mujeres / Foto: José Manuel Correa.- No resulta para nada fortuito que la Unión Interparlamentaria (UIP) indique que el Parlamento cubano es uno de los cinco del mundo donde existe paridad de género, y el segundo a nivel global con mayor proporción de diputadas, 53,4% del total.
Tomada de data.ipu.org
Esas estadísticas son resultado de décadas de esfuerzos y empeños por lograr la equidad de género en la sociedad cubana y, como apuntara el presidente de la Asamblea Nacional, Esteban Lazo, este resultado ratifica la presencia mayoritaria y palpable de la mujer en varios sectores de nuestra sociedad, incluyendo el ámbito legislativo, como logro de la Revolución Cubana.
#Cuba, segundo país del mundo con mayor proporción de mujeres en el Parlamento. Se reconoce la participación y la presencia mayoritaria y palpable de la mujer en varios sectores de nuestra sociedad, incluyendo el ámbito legislativo, como logro de la #RevoluciónCubana. pic.twitter.com/p4hpfnk6mf
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) July 4, 2022
Toda una voluntad política respalda la aplicación y creación de políticas a favor de las cubanas, incluyendo el Programa Nacional para el Adelanto de las Mujeres y también el nuevo Código de las Familias, que se someterá a referendo en lo venidero y donde, desde muy diversos ángulos, igual se afianzan y garantizan los derechos de las mujeres a una vida cada vez más plena, también desde el ámbito familiar.
Según las últimas cifras de la UIP, algunos parlamentos se están volviendo más representativos, y la proporción de parlamentarios mujeres y jóvenes va en aumento. A tal punto es así, que la proporción de parlamentarios que son mujeres se sitúa en un máximo histórico del 26,2%.
En general, la región de las Américas tiene la mayor proporción de representación femenina a nivel mundial, con un 34,6% de parlamentarios mujeres, indica un reciente informe de la UIP, que incluye a 178 órganos legislativos nacionales y 14 organismos parlamentarios regionales asociados, y mensualmente publica clasificaciones del porcentaje de mujeres en los parlamentos nacionales.
Y resulta paradójico que, mientras en esta pequeña isla caribeña —aunque mucho quede por hacer— las mujeres cada vez están más empoderadas, a solo 90 millas, en la nación más poderosa del mundo, las mujeres vean ahora peligrar uno de sus más elementales derechos reproductivos con la prohibición del aborto, dictada allí por el Tribunal Supremo.
