Gilda Fariñas Rodríguez - Cubaperiodistas / Revista Mujeres.- En tiempos de retadores desafíos y una cotidianidad compleja, la Editorial de la Mujer persevera para mantener en pie la esencia fundacional con que nació el 18 de enero de 1978.
Este proyecto de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), que cumple 45 años, afianza su misión de palpitar en la vida de las mujeres y las familias cubanas diversificando los espacios de reflexión, intercambio, debate y sororidad.
Con ese espíritu, las publicaciones de esta Casa editora devienen reflejo del universo social y su pluralidad de problemáticas, juegos de roles y desempeños dentro y fuera de cada hogar.
De ello dan fe, sobre todo, las emblemáticas revistas Mujeres y Muchachas cuyas páginas recogen, no solo las historias de vida y empoderamiento de las cubanas que en esta isla protagonizaron “una Revolución dentro de la Revolución”, también temas que dejaron de ser tabú para visibilizarse: las diferentes formas de violencia contra mujeres y niñas, el feminismo, los contenidos con perspectivas de género, el lenguaje inclusivo, el machismo dominante, la sexualidad….
Justamente, para evocar la memoria de estas más de cuatro décadas, el colectivo de la Editorial organizó una jornada de festividad que, entre otras acciones, reconoció a profesionales que trabajaron en el centro y forman parte de su memoria, creación y trayectoria.
Con esa finalidad sesionó un panel en el que intervinieron las prestigiosas periodistas y fundadoras de la Editorial, Gladys Egües, Heidy González Cabrera e Iraida Campos. Desde sus vivencias personales, ellas rememoraron los inicios intensos de la institución que siempre contó con el acompañamiento y apoyo de la presidenta de la FMC y heroína de la Revolución, Vilma Espín, y de la entrega incondicional de grandes profesionales del periodismo, el diseño, la fotografía, la imagen…
Asimismo, recordaron los sueños, los sacrificios y los compromisos contraídos, a los colegas que ya no están por diferentes razones y que imprimieron su huella en cada propósito impulsado, de la gran familia que creció entre las paredes del edificio que se levanta en las calles Galiano y Neptuno, en el municipio de Centro Habana.
Al analizar las dificultades actuales que vive la poligrafía y el impacto que tienen en las publicaciones, las panelistas reconocieron las ventajas que pueden aportar los formatos digitales y las redes sociales en aras de que los contenidos de las revistas continúen accesibles a sus públicos.
Allí se habló, de la obra iniciada y seguida por las diferentes directoras que dejaron su impronta en la entidad. Los nombres de Carolina Aguiar, María del Carmen Mesta, Aloyma Ravelo e Iraida Campos, fueron homenajeados junto al de la querida Isabelita Moya, Premio Nacional de Periodismo José Martí 2017, a quien se recordó con particular énfasis y cariño por la herencia vital que dejó a las actuales generaciones que hoy tienen la responsabilidad de pilotar los destino de la Editorial de la Mujer.
