"En Cuba es mucho más visible la violencia física y no calculamos el daño de la violencia verbal, como una forma de violencia psicológica", dijo O'Farril al presentar el corto Me niego al silencio

Lirians Gordillo Piña - Red Semlac / Foto: SEMlac Cuba.- Bajo el nombre de CINE+COPIO, un nuevo espacio de cinedebate busca acercarse cada mes a la obra de artistas cubanas y sus intereses creativos, bajo un aliento colaborativo. Joanne Soto Fernández (Titina) y Leyssy O’Farril Nicholas fueron sus primeras protagonistas.

Desde estéticas diferentes, ellas se encuentran en su compromiso social. Ambas van construyendo un discurso propio que habla del empoderamiento femenino y las violencias machistas, respectivamente.

«Mi trabajo es muy espontáneo, lo que ven es lo que siento, es lo que veo», afirma la fotógrafa y realizadora Titina.

CINE+COPIO nace de la colaboración entre el proyecto Women’s Society y el espacio Irreverente, de Irreverencia Producciones, cuya sede en el Vedado capitalino acogió su primer encuentro, el pasado 12 de agosto. La sesión propició el acercamiento a la obra de las artistas, su recorrido profesional y motivaciones.

De Titina se presentó el corto Semilla, material que destaca la fuerza y resiliencia femenina a partir de una secuencia de imágenes de modelos cubanas apoyada en un texto de su autoría.

1. La fotógrafa Joanne Soto Fernández, Titina, y la artista multidisciplinar Leyssy O’Farril protagonizaron el primer cinedebate CINE+COPIO, una colaboración entre el proyecto Women’s Society y el espacio Irreverente, de Irreverencia Producciones. Foto: SEMlac Cuba

La moda fue su ámbito profesional durante muchos años, primero como modelo y luego como fotógrafa. Una vez logró posicionarse en el mercado de la promoción de actores, actrices y músicos, Titina reconoce que sus inquietudes fueron creciendo y hoy va camino a construir un discurso propio, marcado por sus experiencias de vida y su interés en las personas.

Con una estética más directa, Leyssy O’Farril Nicholas quiere hablar claro y “poner el dedo en la llaga”, afirma. Graduada de nivel medio de piano y de realización de sonido en la Facultad Arte de los Medios de Comunicación (FAMCA), esta joven creadora encuentra en la integración de varias expresiones artísticas las herramientas que dan cuerpo a su discurso.

Su corto Me niego al silencio sirvió de pretexto para compartir vivencias y el alcance de una forma de violencia menos reconocida: el maltrato psicológico.

«En Cuba es mucho más visible la violencia física y no calculamos el daño de la violencia verbal, como una forma de violencia psicológica», dijo O’Farril al presentar el filme.

Mujeres y hombres hablan descarnadamente a cámara y reproducen ofensas, descalificaciones y amenazas. En pantalla aparecen palabras claves para reforzar el impacto negativo de este tipo de maltrato, que se recrudece cuando se carga de machismo, racismo y homofobia.

Es la primera vez que O’Farril debate con el público y comparte la historia de vida que inspiró su audiovisual. Ser víctima de violencia verbal y los chats que recogían las agresiones de una expareja le dieron material suficiente para la creación artística.

“Cuando lo vives, logras comprender mejor y empatizar con las otras personas”, recordó.

Para la ensayista y feminista Zaida Capote Cruz, Me niego al silencio tiene el valor de mostrar la intimidad en la que, muchas veces, ocurre la violencia.

“Esta es una realidad muy dura, pues nos percatamos de que cada uno de nosotros va construyendo su ser íntimo en un diálogo muchas veces violento en el ámbito familiar, de la pareja, de amigos”, dijo Capote Cruz al intervenir durante encuentro.

La actriz y dramaturga Eva González, creadora de Irreverencia Producciones, celebró ambas realizaciones y remarcó la necesidad de que “el activismo artístico provoque cuestionamiento, haga pensar y revisitar la realidad que vivimos, también desde la belleza o la risa”.

Articular para crecer

Entre las reflexiones que quedaron de este primer encuentro estuvo la utilidad de contar con espacios habituales para el intercambio con artistas y la importancia de articular proyectos culturales que apuestan por la creación femenina y feminista.

“Yo salgo de aquí más nutrida, me he sensibilizado muchísimo, he recibido y he dado información, me he sentido escuchada y comprendida”, dice Titina a SEMlac.

O’Farril también cree en la utilidad de encuentros que obliguen a las y los artistas a salir de su zona de confort y enfrentarse al diálogo con la audiencia.

“Esta experiencia ayuda a crecer como artista, a ver tu obra de otra manera, desde una visión más crítica, y a mejorarla. Agradezco muchísimo que haya espacios así”, opina sobre CINE+COPIO.

El espacio sigue los principios de Irreverencia Producciones, proyecto que defiende el arte feminista y la colaboración frente a la competencia.

“Irreverencia Producciones tiene la tradición de visibilizar todo el arte hecho por mujeres y el activismo en general, feminista, antirracista”, comenta Eva González a SEMlac.

“Mientras no colaboremos y hagamos redes de trabajo y activismo, seremos islas incomunicadas que se agotan y pasan por vulnerabilidades”, reflexiona la artista.

CINE+COPIO se concibe como un espacio mensual colaborativo para compartir sobre audiovisuales y mujeres. Foto: SEMlac Cuba

Por eso abre las puertas de su casa y espacio artístico a Alay Fuentes, historiador de Arte y coordinador de Women’s Society, junto a la artista visual Day Casas.

Fuentes considera que la cooperación es un camino necesario y afirma que “hacen falta no uno, sino un millón de proyectos para tener más posibilidades de mostrar lo que hacen las mujeres y llegar a las que están en comunidades marginadas”.

Women´s Society busca promover y contribuir a la comercialización de las obras de artistas cubanas desde un enfoque multidisciplinar e incluye en su catálogo a más de 30 creadoras, algunas muy conocidas y otras que comienzan su carrera artística.

Pese a los desafíos logísticos, de promoción y convocatoria que implica sostener espacios habituales un lunes en la tarde, ambos proyectos pretenden mantener el cinedebate CINE+COPIO cada mes, con una propuesta audiovisual e invitadas diversas.