¿Cómo podemos permitir que Bradley Manning tenga que pasar 35 años en la cárcel mientras que los soldados asesinos de la OTAN, que cada día asesinan a personas inocentes en muchas partes del mundo, incluyendo a niños, continúen en libertad?
¿Hasta cuándo vamos a permitir que la Organización de Naciones Unidas con su Consejo de In-Seguridad siga permitiendo tanta falacia?
La decisión del Tribunal Militar de condenar al soldado Bradley Manning a 35 años de prisión ofende nuestros valores ciudadanos y atenta contra la lógica de los principios y reglas jurídicas que debe regir el derecho penal. Condenar a este joven norteamericano por tener el coraje de alertarnos sobre los desmanes que comenten los políticos y generales de su país en los conflictos bélicos interminables en los que han involucrado a sus ciudadanos, lacera nuestra sensibilidad humana.
Lo lógico sería que los miembros del Tribunal Internacional de Justicia como principal órgano judicial de las Naciones Unidas se llenaran de valor y sentaran en el banco de los acusados a los verdaderos criminales de guerra por crímenes de lesa humanidad. Estos criminales de guerra llevan nombres y sus crímenes están más que comprobados.
No es el el soldado Bradley Manning quien ha dañado la imagen y la seguridad de los Estados Unidos de América, los verdaderos culpable son sus verdugos, los mismos responsables de los cientos de miles de víctimas “colaterales” de sus guerras de rapiña.
¿Cuándo nos llenaremos de valor y saldremos a la calle para obligar a nuestros fiscales y abogados a que hagan valer la ley como corresponde?
Lo más normal sería que los condenados fueran los soldados norteamericanos que desde un helicóptero asesinaron cobardemente a ciudadanos indefensos, incluyendo a menores de edad, seres humanos que ningún daño le habían hecho al pueblo norteamericano.
¿Dónde está la agencia de noticias británica Reuters para exigirle justicia al gobierno de los Estados Unidos por la muerte de su reportero gráfico salvajemente asesinado por estos soldados criminales y al mismo tiempo exigir la libertad del soldado Manning?
También sería lógico que después que el soldado Manning informó a la opinión pública internacional sobre como se violan los derechos de los prisioneros en las cárceles de la Base Naval de Guantánamo que un jurado norteamericano decidiera hacer una investigación para castigar a los verdaderos culpables.
El soldado Bradley Manning no merece ir a prisión, como tampoco merece ir a prisión Edward Snowden, todo lo contrario, estos jóvenes merecen nuestro respeto y reconocimiento.
¿Qué sería del futuro de la humanidad si permitiéramos tanta injusticia?
No podemos mantenernos callados, salgamos a la calle y exijamos justicia para el soldado Bradley Manning y para los demás ciudadanos norteamericanos que están corriendo su misma suerte.
Es nuestra obligación en nombre de los verdaderos derechos humanos y por el derecho a la vida para todos, sin distinción de color, cultura y religión.
¡Libertad para Bradley Maning!
No dejemos que sus verdugos se salgan con la suya.
*Por Justo Cruz, cubano residente en Alemania, Coordinador de Cuba Si.
Enviado por el autor a: Martianos-Hermes-Cubainformación
