Noel Manzanares Blanco - Cubainformación.- Poco antes de que trascendiera lo sucedió este 1/11 en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas en ocasión de la denuncia de Cuba sobre el Bloqueo de factura yanqui, me referí a que la Mayor de las Antillas constituye la soledad más acompañada jamás existida por lo que sucede en FIHAV-2017, por las nuevas positivas entre La Habana y Bruselas, y por el rechazo a las acciones anticubanas procedentes de EEUU (1).
Advierto que si bien el resultado de la votación a propósito de tal denuncia era esperado, al mismo tiempo reconozco que su contundencia fue descomunal. La votación de 191 a favor, 2 en contra (los gringos y su aliado Israel) y ninguna abstención ni ausencia al voto (2) me resultó más llamativa porque esperaba que las garras de Washington afectara a algún actor estatal. No paso por alto que Nikki Haley, la embajadora de Trump en la ONU, según llegó a ese foro mundial a principios de este año dijo que “quienes no nos respalden, que sepan que vamos a apuntar sus nombres” (3).
Realmente, en saco roto paró la bravuconería de la propia Haley al justificar la negativa de su gobierno a aceptar el consenso que en esta oportunidad se reflejó en esa Asamblea en cuestión. Ella dijo:
“[…] Es cierto que nos hemos quedado solo en la oposición a esta Resolución. Sin dudas habrá quienes no entienden por qué tenemos una posición tan opuesta 12 meses después cuando el año pasado nos abstuvimos y este año votaremos en contra”. “Seamos honestos esta Asamblea no tiene la facultad para poner fin al bloqueo de los Estados Unidos contra Cuba. Esto que está haciendo la Asamblea General hoy y lo que hace siempre es un teatro político” (4) —las negritas son mías.
Al respecto, infiero que la soberbia de esta señora no le permitía otro razonamiento —menos, a la luz del “odiador en jefe” radicado en la Oficina Oval (5). ¿A quién extraña que la susodicha, a pesar de sentirse obligada a reconocer que se quedó sola en la oposición imperial al proyecto presentado por la Mayor de las Antillas con respecto a la Guerra Económica más larga que registra la Historia, se haya atrevido a faltarle el respeto a la comunidad internacional al catalogar ese escenario mundial de “teatro político”?
(Obviamente, en la misma sintonía se manifestó la otra representante del Águila Imperial cuando usó de la palabra (6). No merece que me detenga en ello).
Por demás, ante el lance de la embajadora de marras, invito a leer las palabras de nuestro Canciller Bruno Rodríguez al presentar el tema “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba” frente al plenario de dicha Asamblea, contentivas del desmontaje del descrédito de la administración de EEUU (7).
Así, constituye una “Verdad de Perogrullo” que la más reciente sesión de la Asamblea General de la ONU constituyó el escenario de turno para revelar cómo la actitud de EEUU vs. Cuba se mueve entre las sandeces y el aislamiento, a juzgar por estas maniobras de despalda a la comunidad mundial.
Referencias:
3.- https://elpais.com/internacional/2017/01/27/actualidad/1485529040_963531.html.
4.- http://www.cubadebate.cu/minuto-a-minuto/2017/11/01/minuto-a-minuto-el-mundo-contra-el-bloqueo/.
5.- https://www.nytimes.com/es/2017/10/10/polariza-y-conquista-por-que-trump-ataca-a-todos/.
6.- http://www.cubadebate.cu/minuto-a-minuto/2017/11/01/minuto-a-minuto-el-mundo-contra-el-bloqueo/.
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