Noel Manzanares Blanco - Cubainformación.- Circula un despacho dando fe de que Juan Orlando Hernández gana las presidenciales en Honduras tras el escrutinio especial, una vez terminado de procesar ¿todas? las actas de votación en la madrugada de este lunes. En por ciento, el ¿triunfador? obtuvo 42,98 seguido del candidato de la Alianza de Oposición contra la Dictadura, Salvador Nasralla, quien alcanzó ¿solamente? el 41,39 % de los apoyos. Todo, con ¿observadores? de la Organización de Estados Americanos y de la Unión Europea (1).
Explico mis interrogantes.
Resulta que tras dos días de demoras en la entrega de resultados oficiales de las elecciones generales, las autoridades electorales de Honduras informaron el miércoles que había mermado la ventaja de Nasralla frente a su contrincante y actual presidente Hernández, después de tener una ventaja de cinco puntos porcentuales cuando se anunciaron los primeros datos el lunes temprano. Para entonces, estaba procesado el 74,71% de los votos (2).
Así, brotó el fraude. Según la misma fuente, a la sazón trascendió: “El gobierno adulteró las actas electorales”, advirtió Nasralla. “Soy del Partido Nacional (oficialista) y siento vergüenza por lo que pasa porque veo cómo algunos se prestan al capricho de los que no quieren soltar el gobierno”, dijo una estudiante universitaria de periodismo.
Otro reporte certifica que en medio de las protestas populares tuvo lugar este pasaje: “'Queremos la verdad, no importa la ideología política, queremos paz', dijo una joven a un canal de la televisión local que lanzó pétalos de flores a un piquete de militares en uno de los bulevares de la capital en dirección hacia la sede del Instituto de Formación Profesional (INFOP), donde se resguarda todo el material electoral” (3).
En tal escenario, se levantó la voz del Presidente Evo Morales: “A casi una semana de las elecciones en Honduras, ¿por qué EE.UU. y la OEA mantienen un silencio cómplice sobre las elecciones y la muerte de ciudadanos? La democracia peligra en un país hermano, Luis Almagro [secretario de la OEA] y compañía no solo no se pronuncian, sino que parecen mirar a otro lado” —escribió en su cuenta de Twitter en Dignatario boliviano (4).
Por mi parte —al tiempo que recordé que entre las últimas andanzas de Mr. Almagro se encuentra su cuestionamiento de la calidad democrática de la Revolución Bolivariana, un lance que provocó que hasta el segmento ¿civilizado? de la oposición venezolana develara la “oreja peluda” del secretario general de la OEA (5)—, me di a la tarea de buscar un mínimo de pronunciamiento de ese sujete y otros actores de la misma especie acerca del fraude electoral de turno, y encontré que esas personas “desconocían” la trama en cuestión, toda vez que ni una palabra hallé al respecto en la Red de redes.
Por tanto, no albergo la menor duda acerca de que el bandolerismo político se confirma en Tegucigalpa por enésima vez y con ello que en Hondura ha quedado al desnudo Almagro y Cía. Y cuando tomo nota del bochinche armado por gente de la misma calaña de cara al actual proceso electoral en la Mayor de las Antillas —asunto que prometo abordar pronto—, no se me ocurre menos que exclamar: ¡Solavaya esa “democracia”!
Referencias:
1.- https://actualidad.rt.com/actualidad/256686-presidente-honduras-hernandez-liderar-elecciones.
4.- https://actualidad.rt.com/actualidad/256600-morales-eeuu-oea-silencio-elecciones-honduras.
