Noel Manzanares Blanco - Cubainformación.- Desde un quinquenio atrás, determinadas señales aconsejan que las mudanzas en el deporte nacional incluyan al liderazgo de su Federación
Hace unas pocas semanas, leí en una entrevista realizada a Ernesto Reynoso, titular de la Dirección Nacional de Béisbol (DNB) en nuestro país —a propósito de una consulta preparada al respecto: “[…] lo más importante es lograr el consenso. Unir a la familia del béisbol cubano”. “El propósito es identificar propuestas que contribuyan al desarrollo gradual del béisbol cubano”. “No solo es un problema de estructura, de deserciones, de una justificación. Hay que buscar todos los resortes para elevar el nivel de la pelota cubana. Eso lo espera Cuba y nosotros trabajaremos por ello” (1).
¡Enhorabuena!, pensé inmediatamente. Y decidí compartir las líneas que continúan.
Ante todo, reconozco que lo compendiado en los últimos días a tono con el espíritu reflejado por Reynoso se encamina al perfeccionamiento de nuestra pelota. Aplaudo el registro de acertadas opiniones (2), al paso que sugiero meditar alrededor de la apreciación emergida en otras latitudes (3). Y aclaro: apenas me considero uno más de los millones de cubanos/as amantes de la disciplina de las bolas y los strikes.
Sin embargo, deseo llamar la atención acerca de un aspecto que hasta este minuto encuentro que transita con insuficiente tratamiento por quienes desde mi ángulo de mira les corresponden ocuparse de ello —a juzgar por lo publicado en este orden de ideas. A diferencia de lo acontecido en la DNB (4), casi no he encontrado pronunciamiento en contra de la permanencia de los principales directivos de la Federación Cubana de Béisbol (FCB) (5), a pesar de que desde hace unos años se han revelaron problemas serios en su funcionamiento.
Debo decir que en la indagación que realicé ¿descubrí? que Yasel Porto resultó “excluido de Bola Viva” por decir en el programa televisivo del 12 de Noviembre último: “…yo estoy de acuerdo que creo que debe haber un nuevo Presidente de la Federación Cubana de Béisbol…” —las negritas son de la fuente (6). Para mí, no se trata solo de un episodio que contradice la relación que encuentro entre Ética, Revolución y Militancia (7), sino de una cuestión muchísimo más importante: es un lance que da la espalda a una orientación del Compañero Raúl Castro, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, a saber:
“No hay que temerle a las discrepancias de criterios y esta orientación, que no es nueva, no debe interpretarse como circunscrita al debate sobre los Lineamientos; las diferencias de opiniones, expresadas preferiblemente en lugar, tiempo y forma, o sea, en el lugar adecuado, en el momento oportuno y de forma correcta, siempre serán más deseables a la falsa unanimidad basada en la simulación y el oportunismo. Es por demás un derecho del que no se debe privar a nadie” —las negritas son mías (8).
Entretanto, resalto una clave: que la FCB sea una Organización No Gubernamental (ONG) no la exime de marchar al calor de la naturaleza de nuestro sistema político (9). Y con este presupuesto, paso a ejemplificar con un par de alusiones a qué me refiero en concreto.
Una: el 15 de Abril de 2015 publiqué “Cuba: entre el Béisbol y la Contraloría” donde anoté:
Diez meses atrás, me fue impostergable compartir con mis lectores/as Cuba: SOS a su Instituto de Deporte. Allí, sugerí examinar Cuba: ¿nuevos? “valores” en su Béisbol donde aparece como inscripción que resulta inaplazable una medida ejemplarizante a los protagonistas de espectáculos bochornosos, y un análisis de la calidad de los directivos del deporte más seguido en la Isla; una suerte de base para abordar el pasaporte falso en manos del destacado pelotero cubano Alfredo Despaigne y la implicación de la Federación Cubana de Béisbol en el asunto. Ahora, aparecen nuevos lodos.
Mis inquietudes últimas en este orden de ideas salieron a partir de la lectura de Gourriel pierde contrato en Japón el 2 del corriente que destaca desde Yokohama que los BayStars DeNA rescindieron el contrato del cubano de nombre Yulieski porque el pelotero no llegó a Japón para el comienzo de la temporada. Mas, hay que meditar sobre lo que puntualmente se lee en la noticia:
“[En opinión del gerente general de las Estrellas de DeNA, Shigeru Takada] Gourriel tenía que llegar a Japón a fines de marzo, después que terminó su temporada en la liga cubana, pero dijo que no arribaría a tiempo por una lesión en un muslo”. “El conjunto nipón decidió rescindir el contrato, cuyo valor estimado era de 3 millones de dólares, cuando Gourriel no suministró evidencia de su lesión ni ofreció una fecha para su llegada”. “Luego de enterarse de su negativa de viajar a Japón en marzo, DeNA intentó comunicarse por todas las vías posibles con él para tratar de convencerlo de hacer el viaje, pero no tuvo éxito” —las negritas son mías.
Sin embargo, en la Nota oficial de la Federación Cubana de Béisbol al respecto, divulgada solo tres días después de que era “comidilla” la información, en apenas nueve renglones “argumenta” lo sucedido y dice en sus tres últimas líneas: “Este proceso se realizó de forma respetuosa y transparente entre las partes, teniendo en cuenta las magníficas relaciones existentes entre la NPB, el Club Yokohama DeNa Baystars y la Federación Cubana de Béisbol” —las negritas son mías.
Entonces, por lo menos me pregunto: ¿De qué manera se puede entender que la Federación Cubana de Béisbol acredite que el “proceso se realizó de forma respetuosa y transparente entre las partes”, si el Club Yokohama DeNa Baystars previamente certificó que “intentó comunicarse por todas las vías posibles con él [Yulieski Gourriel] para tratar de convencerlo de hacer el viaje, pero no tuvo éxito”?
[…].
Pero resulta que solo había transcurrido una semana y me entero que Alfonso Urquiola renuncia a dirigir pelota en Cuba a causa de “la corrupción e inmoralidades” —dice el contenido de ese rótulo que él aseguró en su cuenta en Facebook. “Sinceramente yo estoy decepcionado, lo digo así con toda honestidad”. “Yo determiné que no dirijo más pelota, mientras exista esto yo no dirijo, porque no hay honestidad, no hay de verdad lo que tiene que haber en el béisbol. Uno hace una cosa y lo sancionan y otro hace otra y no pasa nada (…). Me voy para mi casa tranquilo” —amén de significar que “un país como este no se merece eso” y que “hay que sacar al que haya que sacar”.
[…].
En este minuto, de acuerdo con la meditación que he compartido en estas líneas y además de subrayar que necesitamos más de la Contraloría de la República de Cuba, hago constar una alerta, a saber: Si Alfonso Urquiola está difamando, habrá que encausarlo por ello; pero si dice la verdad, las autoridades deben depurar responsabilidades, sin rodeo.
¡Ojalá que no tenga que pasar por aquel comentario que le hicieron a mi Cuba: SOS a su Instituto de Deporte(“Si te responden me avisas” —y una figurita con cara de risa) o por el título Espero no solo la respuesta que nos deben, sino la solución que hace falta publicado hace un mes en Carta a la Dirección del Periódico Granma! (10).
Dos: el 01 de Agosto de 2019 en mi “Cuba: necesitamos más de su Contraloría (3)/ Vamos por la derrota del burocratismo, la insensibilidad o la corrupción, que no pueden aceptarse en el Socialismo —Presidente Díaz-Canel, 26/7/2019”, formulé las preguntas que continúan:
¿Por qué demoró detectar el desastre administrativo —busqué una expresión decente— que determinó “demover del cargo de presidente del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER), al compañero Antonio Eduardo Becali Garrido, atendiendo a deficiencias afrontadas en su trabajo”? ¿Será que resultó una exageración de mi parte sentenciar hace casi cuatro años en “Cuba: la Contraloría y el INDER”: “Es inadmisible, la posibilidad de que manejos sucios en la Pelota hayan sido opacados, y que ahora ocurra lo mismo con el Fútbol? Noooooooooooooo. ¡Abajo cualquier manejo turbio! —so pena de que en el Instituto Nacional de Deporte, Educación Física y Recreación (INDER) robustezcan lanzas contra la Revolución Cubana”? ¿Escapará a la necesidad de la Actualización de nuestro modelo de desarrollo meditar en cuánto se gana o se pierde dejando intacta a la actual dirección de la Contraloría de la República de Cuba, más allá de la pulcritud que exhibe? (11).
Sobre el asunto de marras, también traigo a capítulo el Concepto de Revolución de nuestro Eterno Fidel (12): “Revolución es sentido del momento histórico; es cambiar todo lo que debe ser cambiado…” (13).
Concluyo: si no es un dato secundario el hecho de contar con un nuevo liderazgo en la Dirección Nacional de Béisbol que en poco tiempo ha sido capaz de promover una convocatoria en aras de elevar a planos superiores su razón de ser, entonces considero evidente que llegó el momento de hacer cambios significativos en quienes dirigen la Federación Cubana de Béisbol —más, en base a sus deficiencias. ¡Amén!
Referencias:
3.- https://www.elnuevoherald.com/deportes/beisbol/article237148934.html.
5.- http://www.cubadebate.cu/especiales/2019/11/22/beisbol-cubano-el-ojo-del-tigre/.
6.- https://swingcompleto.com/declaracion-yasel-porto-solo-excluido-bola-viva/.
7.- http://kaosenlared.net/cuba-etica-revolucion-y-militancia/.
8.- http://www.cuba.cu/gobierno/rauldiscursos/2010/esp/r181210e.html.
9.- http://kaosenlared.net/cuba-el-pulso-de-su-sistema-politico/.
13.- http://www.cuba.cu/gobierno/discursos/2000/esp/f010500e.html.