Noel Manzanares Blanco – Cubainformación.- Por investigación-acción e intercambio con colegas y estudiantes —más mi condición/experiencia de negro cubano—, aquilato el asunto
En el título “Racismo en Cuba: crítica a sus críticos”, a modo de Ensayo presento el resultado de una investigación-acción con el objetivo de contribuir al esclarecimiento de la Revolución Cubana al respecto a partir de 1959. Puntualmente, a través de seis actos muestro contrapunteo con artistas destacados, docentes/investigadores, analistas políticos y activistas contra formas de discriminación social.
En ese título, también advierto lo que he divulgado desde 2011 en las webs españolas Kaos en la Red y Cubainformación, y el intercambio sostenido con colegas y estudiantes; al paso que significo en su contenido que lo que constituye una aspiración de Naciones Unidas es dinámica perceptible en Cuba, a pesar de que nos queda mucho por hacer en tal sentido (1).
Con esta premisa reflexiono ahora, pues BBC News Mundo —la que honra sus ¿verdades?: “Varios videos publicados en redes sociales y fotografías mostraron a militares y agentes de civil golpear y disparar contra manifestantes” (2) durante los lamentables sucesos de 11/07 último en determinados lugares de la Isla (3)— procuró saber ¿a ciencia cierta? cómo anda el racismo en Cuba a la luz de esos sucesos.
En concreto, el órgano británico conversó con el historiador Alejandro de la Fuente, profesor de Estudios Africanos y Afroamericanos en la Universidad de Harvard. De ello, trascendió el rótulo “Protestas en Cuba: 'Los que protestaron el 11 de julio fueron los perdedores del capitalismo de Estado y entre ellos están los afrocubanos'” (4) —las negritas son mías.
Mi examen de “Protestas…” me conduce a apreciar que el historiador de marras sostiene una narrativa que se mueve en los marcos de la contraposición verdad-mentira: desde falsos positivos (supuesta realidad negada en la práctica) y fake news (noticias pérfidamente intencionadas), argumenta en base a certidumbres incompletas devenidas ¿verdad absoluta? e ilustración del supuesto fracaso de nuestro Socialismo.
Ante todo, prevengo un par de pifias iniciales presentes en la conversación sostenida por BBC con el académico en causa: una, ni nuestros enemigos más acérrimos niegan que tenemos Socialismo legitimado a instancia constitucional (5) y que se diferencia del “capitalismo de Estado” por no tener “un entorno social y económico capitalista” o sea, de dominio de la propiedad privada burguesa (6).
La otra pifia reside en que el negro/a cubano/a no es “afrocubano/a” o “afrodescendientes”, si se tiene en cuenta la mezcla que exhibe la etnia cubana: al razonamiento que al respecto ofrecí en “Racismo en Cuba: crítica a sus críticos”, le añado las aportaciones que constan en “Contra el racismo y la discriminación: Ni composición racial ni etnias, somos cubanos”, específicamente las de Rolando Rensoli Medina, Vicepresidente de la Comisión Aponte de la UNEAC (7). Todo, de la mano del siguiente magisterio de Fernando Ortiz:
“[…] Cuba es un ajiaco./ ¿Qué es el ajiaco? Es el guiso más típico y más complejo, hecho de varias especies de legumbres, que aquí decimos ‘viandas’, y de trozos de carnes diversas; todo lo cual se cocina con agua en hervor hasta producirse un caldo muy grueso y suculento y se sazona con el cubanísimo ají que le da el nombre”. “La imagen del ajiaco criollo nos simboliza bien la formación del pueblo cubano. Sigamos la metáfora” (8).
Pasando a un plano más profundo de las reflexiones del mencionado profesor de la Universidad de Harvard, apenas me voy a referir explícitamente a tres de sus evidentes incongruencias —las destaco en negritas y/o las explico:
Una: “[La situación de 'los cubanos afrodescendientes'] Es fruto de una composición sociodemográfica cubana, no de una política de fines racistas, pero produce diferencias masivas. Y se suma el hecho de que el sector turístico y privado que se ha desarrollado en Cuba ha sistematizado políticas de empleo racistas y excluyentes […]”.
Dos: “Esos grupos ['empresariales vinculados al Gobierno'] trabajan con el capital extranjero y eso explica por qué en 2020, mientras la gente pasaba enormes necesidades, las inversiones en nuevos hoteles se disparaban. El dinero fluía hacia los nuevos hoteles, mientras la gente no tenía qué comer”.
Hallo bien alegar que las inversiones “en nuevos hoteles se disparaban” como mecanismo de búsqueda/recepción de moneda libremente convertible con la cual a duras penas se compraba/se compra en el mercado internacional lo que se precisa para evitar que “la gente” pasara “enormes necesidades”.
Hallo bien alegar asimismo que es tangible que para provocar un efecto contrario al generado por el Turismo en Cuba el señor Trump intensificó el Bloqueo —Biden no se queda atrás— y desapareció la llegada de Cruceros, turistas estadounidenses…; más agravado tras incluirnos en la espuria lista de países patrocinadores de terrorismo (9). Y en medio de tantas desgracias, Resistimos/no nos detenemos en la lucha; un lance que ¿desconoce? el profesor aludido.
Tres: a la pregunta “¿Y la revolución encabezada por Fidel Castro abordó este problema?”, responde: “Se produce entonces [a partir de 1959] un debate público sin precedentes y Fidel Castro hace un llamado a hablar del tema, a ganar la batalla contra la discriminación […]./ Pero dos años más tarde Fidel ya empieza a hablar del racismo como algo del pasado que ya se superó, y, por lo tanto, recupera y recrea el nacionalismo cubano, que tiende a silenciar este problema no resuelto”.
En este punto —aparte de sugerir consultar lo que abordé en el citado Ensayo—, significo el juicio de Fidel en los finales de 1998:
“El hecho es que nosotros no hemos resuelto ese problema, y no es por falta de voluntad ni mucho menos, es que hay una cultura heredada de la esclavitud y aún después. Porque los negros estaban peor casi que cuando eran esclavos. De dónde iban a salir ilustres, grandes eminencias, grandes intelectuales si no iban a la escuela. Y esa es la situación de la población negra en nuestro país, estoy absolutamente convencido.
“[…] Tenemos que hacer un examen de conciencia de verdad. Hay que crear una escuela sobre esta problemática. Nosotros que somos, como ustedes dicen, multiétnicos, multirraciales y multiculturales, tenemos que resolver este problema y deberíamos ser ejemplo en su solución. Y hay que decir, después de tantos años de Revolución, que nos hicimos ilusiones acerca de su naturaleza” —según compilación de Elier Ramírez (10).
No obstante, con mis tesis no pretendo negar que hubo un indeterminado segmento de negros/as en los sucesos del pasado 11/07 ni que muchos asistieron a ese evento tanto abrumados por las escaseces causadas por el Bloqueo yanqui como por problemas subjetivos en nuestro sistema político-administrativo —por cierto, hoy en camino de solución (11, 12).
Pero tampoco voy a negar que lo avanzado en este y otras temas peliagudos son obra de nuestro Socialismo, del mismo sistema que construimos desde el legado martiano, marxista y leninista de Fidel, con el acompañamiento de Raúl y la conducción partidista y estatal de Díaz-Canel; y que acaba de ratificar “su compromiso en la lucha contra todas las formas de racismo y discriminación” (13).
En última instancia, aprecio que la posición del docente de Estudios Africanos y Afroamericanos en el asunto tratado en la Isla es coincidente con la de algunos académicos sociales que al examinar los sucesos del 11/07 culpan a las autoridades del patio y vacilan ante las apetencias Made in USA —tal como indiqué en “Cuba: Verdad vs. agoreros” (14).
Concluyo: mis años de investigación-acción e intercambio con colegas y estudiantes sobre el tema en cuestión —y mi propia condición/experiencia de negro cubano—, me permiten aquilatar el pulso del racismo en el país/valorar su existencia. Acredito, pues, que la animosidad del historiador Alejandro de la Fuente no le permite enjuiciar en su justa medida los avances de nuestro Socialismo en este ni otro orden, incluyendo su perfeccionamiento (15); al paso que certifico que la política contra cualquier discriminación en Cuba tiende a ser superada y cada vez más legitimada, en base al artículo 42 de nuestra Constitución (16). ¡Amén!
Referencias:
1.- https://doi.org/10.46661/revintpensampolit.5615.
2.- https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-57793145.
3.- https://www.cubainformacion.tv/la-columna/20210726/92503/92503-cuba-el-pulso-en-el-2021-11.
4.- https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-58022058.
6.- https://economipedia.com/definiciones/capitalismo-de-estado.html.
8.- http://www.perfiles.cult.cu/articulos/factores_cubanidad.pdf.
10.- http://www.cubadebate.cu/opinion/2019/06/30/fidel-y-la-uneac/.
14.- https://www.mes.gob.cu/node/390.
16.- http://www.granma.cu/cuba/2019-01-05/en-pdf-nueva-constitucion-de-la-republica-de-cuba.
