Gerardo Moyá Noguera*.- Sí, se tortura en Cuba, pero en la base naval de Guantánamo y todos se mantienen callados. Después del 11 de septiembre, fecha fatídica, el ciudadano pakistaní Majid Khan fue brutalmente torturado hasta que "confesó" pertenecer al fundamentalista grupo de Al-Qaeda de Osama Bin Laden. Dicha base pertenece desde hace muchos años al imperio (EEUU) aunque el ex presidente Obama en su campaña electoral nos dijo que cerraría para siempre la base, pero no ha sido así y allá se sigue torturando a los presos existentes en la misma hasta que no pueden más aguantando terribles torturas por parte de los sicarios que viven en la base de Guantánamo.
¿Se manifestarán los ciudadanos contra estas prácticas inhumanas que viene sufriendo constantemente los allí presos? No, claro que no. Una vez más vivimos en un mundo hipócrita que permite estas prácticas y que el imperio consiente y permite y para más inri el presidente Biden apoya directamente, porque el hombre más poderoso del planeta tierra, aún sabiendo de estas atrocidades mira para otro lado, del lado del capitalismo más atroz e inhumano al permitir estas torturas contra personas inocentes. También permanece calladito el señor Borrell y lo que representa ya que Bruselas está muy lejos y que si se le da por denunciar estas prácticas abusivas pudiera ser que no permaneciera mucho más tiempo en el suculento cargo que ostenta. ¡¡¡Qué pena!!! Esta sí que es una situación en la que el parlamento europeo tendría o tiene la santa obligación de entrometerse para que la base naval de Guantánamo sea devuelta, de una vez por todas, al pueblo cubano que es el auténtico propietario de este trozo de tierra y que los gringos/torturadores allá instalados regresen para siempre al imperio (EEUU) y si no lo hacen es por cuestiones de compadreo y de intereses hacía la nación, según dicen, más poderosa de la tierra. Recordaremos, porque bueno es recordar, que el gobierno del pueblo cubano comandado por Díaz-Canel nunca jamás ha torturado ciudadano alguno, ni tan siquiera a los peores enemigos en tiempos del dictador Batista y si no echen una mirada atrás a lo ocurrido con los presos después de la humillación que sufrió el imperio en las playas de Girón, cuando dichos presos fueron cambiados por tractores, etc. y no olvidemos que la mayor de las antillas sigue después de 60 años con un criminal bloqueo, económico, comercial y financiero que hace que la isla siga permanentemente en una guerra silenciosa, porque lo que persigue el imperio con esta medida es la destrucción de la revolución cubana y desde aquí y siempre les decimos, nunca jamás la isla volverá a ser propiedad de los noteamericanos. Jamás. El mundo civilizado y globalizado (como dicen) no puede ni debe permitir estas torturas contra personas que ni tan siquiera han pasado por los tribunales (aunque la tortura, que sí existe, debe pasar a ser, de una vez por todas al terrible pasado) y un vez más demuestran que con estas prácticas torturadoras la semejanza con los nazis del pasado es total y que nunca más queremos volver a pasar. Y que el Papa le diga al presidente en su reciente visita al Vaticano : "eres un buen católico"...No tengo palabras....
Gerardo Moyá Noguera