Gerardo Moyá Noguera*.- En su recorrido por Ciego de Avila, el presidente de la República de Cuba y primer secretario del comité central del partido, el compañero Miguel Díaz-Canel Bermúdez, nos dejó unas bellas y auténticas palabras, las siguientes: "Dos tesoros inolvidables para preservar: unión y continuidad". Según Cubainformación el presidente también estuvo presente en los debates de la asamblea de balance de la organización en el municipio de Camagüey.
Debemos insistir hasta la saciedad con estas dos palabras: unidad y continuidad. Esta Revolución que comenzó en 1868 efectivamente ha tenido y tiene continuidad, finalizando su actividad en Sierra Maestra el 1º de enero del 59, cuando el invicto comandante en jefe Fidel Castro entró en La Habana con parte de sus tropas rebeldes. Dicho por Fidel, la Revolución tiene su principio en 1868 cuando el padre de la patria, Carlos M. de Céspedes comenzó la lucha contra el colonialismo español, liberando a todos los esclavos que en aquel momento tenía y que muchos o la mayoría de ellos se unieron a la lucha junto con Carlos M. de Céspedes. una vez más hacemos hincapié en la continuidad, no solo en la resistencia frente al criminal bloqueo económico, comercial y financiero impuesto contra Cuba por el imperio/EEUU desde hace 63 años, sino también a la unidad del pueblo cubano y otros países como Nicaragua, Venezuela, Bolivia, etc. que también son víctimas del bloqueo y sus mercenarios-conspiradores-
*Presidente de la Casa de Amistad Baleares-Cuba