Gerardo Moyá Noguera*.- Se ve muy poca gente por la calles de Palma, sobre todo a partir de cierta hora de la tarde. ¿Será por la guerra existente entre Ucrania y Rusia? o es que debido a la misma la gente no quiere gastar más de lo que tiene o no tiene y me refiero a sus posibles ahorros.
Incluso la consellera de Sanidad del Govern balear ha dicho en un periódico local que quizás necesitaría un psicólogo ya que el desanimo está muy presente entre la sociedad y no solamente la española sino del mundo entero creo. Nos acostamos con la guerra y sus desastrosas consecuencias y nos levantamos con la misma actitud. ¿Es esto vida? En parte seguimos aquí vivos y coleando, pero no sabemos hasta cuándo podremos seguir así, ya que los señores de la guerra siguen empeñados en ella y también en enriquecerse a costa de la misma. Las fábricas de armamento y sus patronos se harán más ricos de lo que son, porque cualquier guerra necesita, claro, de su armamentos bélico. No les quepa la más mínima duda. Los graneros de Ucrania están prácticamente vacíos y poco a poco se nota la falta de estos alimentos en muchos super-mercados de Europa y España, claro. Ejemplos hay mucbos, encarecimientos del aceite de girasol, de los tomates y casi todo tipo de legumbres existentes.
*Presidente de la Casa de Amistad Baleares-Cuba