Wilkie Delgado Correa* - Cubainformación.- Un libro propio es como un hijo soñado
La lectura de un libro deseado siempre es una aventura con sorpresas emocionantes. Cuando se trata de un libro propio y salido de la imaginación y el esfuerzo intelectual es como el encuentro con un hijo soñado.
En esta edición del 2022 de la Feria Internacional del libro de La Habana circulará mi obra titulada Diccionario de Fisiología (en formato ebook), con coautoría de Iván Delgado Suárez, que incluye un glosario trilingüe en español, inglés y francés. Y ello es un motivo de satisfacción y alegría, también acompañada de interrogantes por la posible acogida de parte de los lectores.
Sin embargo, cuando uno piensa en su trayectoria como escritor siempre llega el recuerdo de la primera vez y de la primera obra que viera la luz en fecha ya lejana.
Así que recuerdo que fue en la adolescencia y juventud, junto con otras inquietudes individuales y sociales, que empezaron aquellos intentos tempranos de escribir los poemas y cuentos que se fueron acumulando en una gaveta sin propósitos serios. En mi caso los cuentos, con excepciones de algunos de temas fantásticos, trataron de reflejar la realidad vivida y conocida en un intento de copiarla o dibujarla. Ya en mi época de estudiante universitario algunos fueron revisados y perfeccionados para la participación en un concurso literario de la Universidad de Oriente. El titulado Una noche de dos mundos ganó el primer premio. Posteriormente participé en un concurso literario auspiciado por el Ministerio de Cultura de la Provincia de Oriente con el cuento Regreso a la casa con la muerte, al que se le otorgó el premio.
Esta colección de cuentos quedaron engavetados, podría decirse abandonados, a causa de mis fundamentales quehaceres profesionales como especialista en Fisiología Médica y la formación en el doctorado en Ciencias Médicas, en que la docencia y la investigación eran ocupaciones prioritarias.
No obstante, en un respiro e impulso durante el año 1976, y en medio del apuro por terminar la redacción de la tesis de doctorado, hube de remitir la colección de trece cuentos al concurso literario de Casa de las Américas.
Ese año el jurado de cuento otorgó el Premio compartido (ex aequo) a los escritores argentinos Pedro Orgambide por Historias con tangos y corridos y Eduardo Mignogna por Cuatrocasas. También el jurado emitió un dictamen reconociendo la calidad de los cuentos de mi obra.
Pasó el tiempo y diez años después estos cuentos conformaron el libro titulado “Una noche de dos mundos”, publicado por la Editorial Oriente en 1986, que incluía 13 cuentos distribuidos, cinco en la sección Las tinieblas y ocho en la sección Los amaneceres.
La obra, tal como se expresa en la contracubierta, refleja la vida del hombre en momentos que transcurren desde las tinieblas de la explotación y la tiranía hasta las auroras de la Revolución. Los personajes son hombres, mujeres y niños inmersos en una realidad social que incita a la lucha por su liberación y felicidad. Se representa con fidelidad el medio hostil, con diversos matices y con los prototipos que lo sustentan.
Esta obra narra y muestra la lucha revolucionaria en la ciudad y las montañas, la vida del hombre común con su carga existencial y sus atisbos de rebeldía, las decididas acciones de los luchadores clandestinos y de los guerrilleros, las vivencias de los niños y jóvenes crecidos por el combate circundante, los sueños y batallas de las mujeres. En fin, muestra el heroísmo de la gente del pueblo enfrentada a una lucha a muerte contra sus enemigos. Al cabo de la larga trayectoria recorrida, más allá del llanto y de la sangre, emerge con fuerza incontenible la visión de la victoria anunciada simbólicamente por un gesto valeroso o una sonrisa.
Doctor en Ciencias Médicas. Doctor Honoris Causa. Profesor titular y consultante. Profesor Emérito de la Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.