Gerardo Moyá Noguera*.- Como cada vez que nos visita un buen amigo que vive en La Habana Cuba, vamos a solicitar hora para conferenciar en una de las salas de la casa del pueblo, UGT, sobre Cuba y las pymes.
La administrativa de recepción de la Casa del Pueblo me hace rellenar, por primera vez, lo que hago al momento presentando mi dni, teléfono móvil, dirección y motivo de la conferencia, hasta aquí todo bien. Al llegar a mi casa y unas horas después recibo una llamada desde recepción de UGT y me informan que la conferencia queda anulada por "orden" de arriba, o sea, de algún "dirigente" de la comisión ejecutiva de UGT, la Casa del Pueblo se supone. Insisto en saber quién era dicho personaje y al final y después de insistir, me da su nombre, se llama Miguel Herrán. A continuación de la llamada indignante e incomprensiva, llamo al ex secretario general de UGT, una buena persona y le informo de la mala decisión que han tomado desde la UGT. Le informo de que mañana saldrá en un periódico que se llama Última Hora una carta al director explicando todo el asunto, lo que da su opinión afirmativa y añade que tampoco entiende dicha decisión. Ah!! he olvidado que pertenezco a la unión de jubilados y pensionistas de la UGT desde hace casi 50 años, lo que informo a la administrativa-recepcionista del sindicato. Parece ser que mi militancia "le importa un bledo". Conclusión: hablar de Cuba y las pymes a la UCA (comisión ejecutiva) de la Casa del Pueblo no les importa nada y además crucifican a Cuba tal como el imperio/EEUU y sus mercenarios lo hacen. Exactamente igual. Mercenarios del dinero y lacayos del sistema.
Presidente de la Casa de Amistad Baleares-Cuba
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