Ciento cuarenta y dos años atrás, el 16 de julio 1881, nació en La Habana el destacado antropólogo, jurista, arqueólogo y periodista Fernando Ortiz Fernández, conocido como el tercer descubridor de Cuba.
El erudito ganó este epíteto por el aporte de sus estudios sobre numerosos estadios de la sociedad de la isla. Ante la multiplicidad de sus intereses científicos, se hizo criminólogo, etnólogo, lingüista, musicólogo, folklorista, economista, historiador y geólogo. Relevantes fueron sus trabajos vinculados con las raíces histórico-culturales afrocubanas.
Con su obra Los negros esclavos (1916), hizo valiosas contribuciones al estudio de la esclavitud en Cuba y sentó las bases de lo que serían las investigaciones etnográficas en el país. (I)
Entre sus trabajos, hay obras que abordan las raíces de la forma de ser del cubano. Y en su libro La decadencia cubana (1924), defiende la cultura como vía para preservar la libertad. Con la publicación de Contrapunteo cubano del tabaco y del azúcar (1940), “introduce su concepto de transculturación, para explicar el rico proceso por el que se produce la fusión de culturas que da lugar a la extraordinaria amalgama que representa lo cubano”. (II)
El engaño de las razas, escrita en 1945 como parte de la campaña de oposición al nacionalsocialismo alemán, evidencia la insostenibilidad científica de la discriminación por el color de la piel, y la necesidad de difundir esa verdad.
Mostrar cómo la hechicería formaba parte consustancial de la cultura europea que llegó a Cuba con los colonizadores, fue su propósito con Historia de una pelea cubana contra los demonios (1959).
Como la más trascendente de sus obras a nivel mundial está considerada Los instrumentos de la música afrocubana (1952-1955), publicada en cinco tomos.
Investigaciones de la autoría del distinguido científico relacionadas con las culturas aborígenes de Cuba son Historia de la arqueología indocubana (1923) y Las nuevas orientaciones de la prehistoria cubana (1925).
Fernando Ortiz, cuya vida se extendió casi nueve décadas, creó y editó numerosas revistas y colaboró con diversos medios de prensa nacionales y extranjeros.
“Su posición en defensa de la causa de los negros, así como su reivindicación de la herencia indigenista, sitúan a Ortiz como un decidido representante del antirracismo en Cuba”. (III)
(Tomado de Cuba en resumen).
Notas
I. Historia de la ciencia y la tecnología en Cuba, Pruna Goodgall, Pedro M., Editorial Científico-Técnica. La Habana, p. 178.
II. bidem.
III. Cien figuras de la ciencia en Cuba. García Blanco, Rolando, 2002, Editorial Científico-Técnica. La Habana, p. 300.
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