Cristóbal León Campos - Cubainformación.- Tras una semana de manifestaciones y represión, Colombia vive el comienzo de una nueva etapa de lucha de clases, que deja atrás los primeros días de resistencia contra la reforma tributaria que el presidente Iván Duque buscó implementar, y que después de 4 días de movilizaciones sociales se vio obligado a retirar, siendo que la clase obrera y los sectores populares han decidido extender la protesta e ir gestando una rebelión que posibilite la huelga general y el derrocamiento del gobierno neofascista de Duque, quien además, se ha caracterizado por ser un claro agente sometido al deseo imperialista y un desestabilizador en la región por sus declaraciones y actos en contra de los pueblos-gobiernos de Venezuela y Cuba.
Cristóbal León Campos - Cubainformación.- Una de las primeras cuestiones que resaltaron en la escena mundial al declararse la pandemia del coronavirus Covid-19, fue la endeble situación de la existencia de millones de seres humanos a lo largo del mundo, esto, debido a que las condiciones económicas de sobreexplotación incrementaron el empobrecimiento, la precariedad, la segregación y la marginación con el paso de los años, además, la desarticulación de los derechos sociales como la salud y el trabajo manifestaron su repercusión agudizada con los efectos de la pandemia que después de más de un año y más de tres millones de fallecidos aún sobrellevamos, viviendo ahora los países europeos considerados “desarrollados” una tercera ola que los golpea en la profundidad de sus carencias evidenciando la realidad que en ellos se vive, por ejemplo, los casos extremos de España e Italia, que desde la crisis pasada en la economía planetaria de principios del siglo XXI, vieron reducirse de manera abismal el empleo para su población arrojando a cientos de miles a las calles, situación que para la realidad latinoamericana conocemos muy bien, debido al azote que han significado las políticas neoliberales impuestas durante décadas por el imperialismo estadounidense, la propia Unión Europea y los organismos internacionales aliados a su interés como la Organización de los Estados Americanos (OEA). El resultado inmediato de la fase neoliberal del capitalismo mostró una de sus repercusiones primarias como fue la reducción de la responsabilidad del Estado en torno a los derechos sociales-humanos, los recortes presupuestales en asuntos de salud y trabajo, despojaron a millones de sus empleos y de la posibilidad de jubilación o pensión, así como de recibir un servicio de salud digno, o en el peor de los casos, al menos recibirlo, aunque fuera reducido. La disminución del presupuesto en salud deterioró en todos los sentidos los bienes públicos, priorizando la privatización y con ello marginando a quienes no tienen el recurso para pagar por el cuidado necesario en la vida diaria como en situaciones excepcionales de pandemia, epidemias o desastres naturales y sociales se requiere.
Cristóbal León Campos - Cubainformación.- Eso es lo que no pueden perdonarnos, que estemos ahí en sus narices ¡y que hayamos hecho una Revolución socialista en las propias narices de Estados Unidos! Fidel Castro Ruz
Cristóbal León Campos - Cubainformación.- Se ha pretendido vaciar de ética a la palabra, se quiere exentarla de todo compromiso, en el discurso del pensamiento hegemónico occidental-capitalista, la palabra pierde su cualidad garante de responsabilidad social, haciendo del discurso un vacío que se diluye. Repensar el papel de los intelectuales en las sociedades actuales es una necesidad imperante, algunas voces conformes a los poderes imperiales, han divulgado la idea de que ante los avances tecnológicos en la comunicación, el lugar tradicional que han ocupado los intelectuales ha pasado a segundo plano, idea acorde a la dispersión del pensamiento crítico, trampa que en el fondo busca apoyar la creencia de que las nuevas formas de comunicación digital han “democratizado” la comunicación y, por tanto, aquellos seres dedicados al pensamiento pierden utilidad, pero en realidad, la implantación de la hegemonía cultural-capitalista, es elaborada por intelectuales al servicio del interés burgués. La respuesta ante el pretendido desplazamiento es el reforzamiento y reposicionamiento de los intelectuales comprometidos entre los explotados y desposeídos.
Cristóbal León Campos - Cubainformación.- Sabemos que José Revueltas escribió poesía, pero pareciera que aún no comprendiéramos por qué la escribió, y es que aún hay quien duda que la poesía sea sinónimo de vida, siendo Revueltas es el más “vividor” de todos a pesar de su carácter “moridor”. Fue un ser irredento que incineró las prisiones con dignidad, vivió mientras moría y lo hizo entregado al ideal socialista. Melancólico y soñador revolucionó la literatura mexicana, innovó el pensamiento en tiempos de ortodoxia y se reveló ante sus propios dioses. Revueltas es poesía porque fue vida.
Cristóbal León Campos - Cubainformación.- Un día después del crimen cometido el 10 de abril de 1919, el periódico Excélsior, publicó la noticia cuyo encabezado en primera plana decía: “Murió Emiliano Zapata: el zapatismo ha muerto”. La aseveración de muerte de todo el proyecto zapatista a más cien años del asesinato del líder del Ejército Libertador del Sur, resulta a todas luces, una más de las falsas declaraciones que la conveniencia política arroja sobre diversos medios de comunicación, el zapatismo está más vivo que nunca tanto en las comunidades autónomas de Chiapas como en cada uno de los rincones latinoamericanos en donde los pueblos organizados resisten al despojo y la depredación del capitalismo.
Cristóbal León Campos - Cubainformación.- Las protestas en Haití continúan exigiendo la salida del poder del expresidente Jovenel Moïse, cuyo periodo de gobierno finalizó el pasado 7 de febrero, y quien es sostenido el imperialismo estadounidense, la Organización de Estados Americanos (OEA) y la estructura de ocupación militar neocolonial de la MINUSTAH establecida desde el 1 de junio de 2004 tras el exilio del exmandatario Bertrand Aristide (derrocado por Estados Unidos) por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con el supuesto fin de “apoyar la labor inmediata para la recuperación, reconstrucción y estabilidad del país”, según puede leerse en la Ficha Informativa del organismo internacional. Pero la realidad es otra, ya que Haití sigue sometida a los intereses del imperialismo estadounidense que utiliza la posición geoestratégica del país caribeño para saquearlo y para ejercer presión y control en la región con la complicidad de los gobiernos dictatoriales que ha impuesto y mantenido.