Del relato de título: Pestes. Autor: Eduardo Galeano. Título del libro: Espejos. Edita Siglo XXI.
... En tiempos normales, los campesinos trabajaban y además pecaban. Cuando las pestes ocurrían, ellos tenían la culpa. Las desgracias no golpeaban porque los curas rezaran mal, sino porque sus fieles eran infieles. Desde los púlpitos, los funcionarios de Dios los maldecían: -¡Esclavos de la carne! ¡Ustedes merecen el castigo divino!