El día 17, (marzo de 1924), New York Times se hacía eco de la llegada de nuevas tropas a Nicaragua:
La decisión del gobierno de Estados Unidos de enviar a Nicaragua marinería de refuerzo es interpretada como una prueba inconfundible de que el Departamento de Estado está resuelto a mantener el convenio Stimson, según el cual la realización de las elecciones de octubre deberá ser fiscalizada por las autoridades norteamericanas. Una vez llegado el nuevo contingente, habrá en Nicaragua mayor número de fuerzas norteamericanas que en ningún momento durante la revolución del año pasado. Además de los tres mil setecientos hombres de tropas de desembarco que se encuentran en el país, hay en los puertos cinco cruceros, cuyas tripulaciones pueden engrosar en cualquier momento las fuerzas ya desembarcadas.
…Se necesitan voluntarios amigos del actual orden de cosas, para alistarse en la expedición que va al norte a combatir al bandolerismo. La Oficina de Enganche está en el Ministerio de Guerra y Marina. Anastasio Somoza, secretario de la Comandancia General y Encargado del Ministerio de la Guerra.
Del libro titulado El pequeño ejército loco. Autor: Gregorio Selser. Editorial Fondo de Cultura Económica.