Wilkie Delgado Correa* - Cubainformación.- ¿Cómo curar a la vez el ¨yanquijupiterismo” y la ¨yanquimanía¨?
Con cada cambio durante el ciclo presidencial el mundo espera, quizás con cierta ingenuidad, que el nuevo gobierno de los Estados Unidos anuncie y sea portador de una nueva y renovadora política. Después del mandato de un egocéntrico como Donald Trump, la figura de Joe Biden ¨parecía¨ más comedida y atildada. Pero no, se trataba de una simple apariencia externa. Y el hombre, para que no le crean débil, quiere demostrar sus ínfulas de mandamás. Así se explican sus amenazas contra China y contra Rusia, sus sanciones, los calificativos soeces contra Putin, las opiniones injerencistas sobre asuntos internos de los países, las provocaciones en Taiwan y mares cercanos a China, los azuzamientos de la OTAN, las torceduras del brazo a determinadas naciones europeas y especialmente su guerra en Ucrania. Así que se puede afirmar que ¨este Mambrú también se fue a la guerra¨. Pueden citarse más ejemplos, pero cada lector puede añadirlos según su conocimiento y convicción.