Campesinos y políticos reiteraron hoy su compromiso de seguir un plan de protestas masivas para evitar la conversión del agro mexicano en un refugio de víctimas del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), reportó PL.
Los productores de maíz ven desaparecer sus cultivos nacionales.
Las bajas temperaturas en la frontera norte de México y Estados Unidos, punto de reunión, no mermaron el ánimo de los miembros del Frente Democrático Campesino de Chihuahua (FDCCH) y la Coordinadora Nacional Plan de Ayala.
La demanda por una revisión del TLCAN para excluir del nexo al maíz y el frijol fue refrendada por la Unión Campesina Democrática y las Alianzas Agropecuarias, Pesqueras y Agrícolas Fronterizas.
Las organizaciones anunciaron que la presión aumentará a partir del 31 de enero con marchas simultáneas en Ciudad de México, Morelos, Jalisco y Michoacán, con el lema Sin maíz no hay país.
Los partidos Revolución Democrática (PRD), Revolucionario Institucional (PRI), del Trabajo y Convergencia alertaron sobre el riesgo de un conflicto social, si no se renegocia el TLCAN.
El diputado del PRD Emilio Ulloa lamentó la desatención oficial a productores mexicanos; mientras expertos en derecho agrario y en materia de amparo indicaron que el vínculo comercial vulnera los conceptos de soberanía alimentaria, autodeterminación e independencia económica, así como el concepto de democracia social consagrado en la Constitución.