Elson Concepción Pérez - Radio Cadena Habana.- En julio próximo, Cuba entregará la presidencia del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL), que ha ejercido en dos oportunidades, a Egipto, nación que será sede de la XV Conferencia de Jefes de Estado y Gobierno.

Nuestro país, que entre lunes y miércoles de la próxima semana acogerá la Reunión Ministerial del Buró de Coordinación de ese espacio de concertación política, ha contribuido a que el Movimiento se fortalezca y su presencia activa se constate, lo mismo en foros internacionales, regionales y otros, en la búsqueda de soluciones a conflictos internos en que han estado inmersos países miembros.

En su trayectoria de casi 50 años, el Movimiento de Países No Alineados ha levantado como bandera la defensa del multilateralismo, el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, el desarrollo, la cooperación económica y la democratización de las relaciones internacionales.

En ese proceso, el No Alineamiento no escapó de las nefastas consecuencias políticas derivadas del derrumbe del campo socialista europeo y la desintegración de la URSS, momento que posibilitó que el hegemonismo y el unipolarismo prevalecieran en las relaciones internacionales.

Se impuso entonces fortalecer los esfuerzos de unión y solidaridad entre los países del Sur, lo que ha requerido de la elaboración de nuevas estrategias, desplegadas fundamentalmente en las cumbres de Sudáfrica, Malasia y Cuba, que han llevado al Movimiento a un momento actual de plena vigencia y cosecha de lauros indiscutibles.

Hoy es una realidad la presencia del Movimiento de Países No Alineados y sus diversos grupos de trabajo en la sede de la ONU en Nueva York, así como su papel en el
Consejo de los Derechos Humanos en Ginebra; en las labores con la intelectualidad internacional en la UNESCO, y en otros espacios de concertación en el mundo globalizado en que vivimos.

Cuba, fundador de este Movimiento nacido en Belgrado en 1961, aboga por un NOAL fuerte y cohesionado, más necesario que nunca en el actual contexto internacional, caracterizado por un mundo unipolar, en el cual impera el uso de la fuerza, el irrespeto a la soberanía y al derecho de los Estados a su independencia.

La voz y la presencia del Sur, hacen único e imprescindible al Movimiento de Países No Alineados; y así quedará constatado, lo mismo en la reunión ministerial de La Habana la semana próxima, como en la XV Cumbre en Egipto, en el venidero mes de julio.