Ilsa Rodriguez - Prensa Latina.- La embajadora cubana Ileana Núñez condenó hoy la política de bloqueo de Estados Unidos contra su país y explicó las dificultades que ocasionan esas medidas punitivas en el proceso de pago de sus cuotas a Naciones Unidas.

La diplomática habló ante una sesión de la V Comisión de la Asamblea General dedicada al Mejoramiento de la Situación Financiera de las Naciones Unidas.

La representante permanente alterna de Cuba ante la ONU señaló que la imposibilidad de usar el dólar en las transacciones internacionales "provoca que nuestras transferencias estén sujetas constantemente a las fluctuaciones monetarias del mercado"

Núñez dijo que esta situación incide negativamente en la capacidad de pago de Cuba, a la cual se adicionan las dificultades para liquidar las cuotas a las Naciones Unidas, que hay que realizar a través de un tercer Estado.

Nuestro país mantiene al día sus contribuciones al Plan Maestro de Mejoras de Infraestructura, ha liquidado la mitad de sus cuotas al presupuesto ordinario y ha realizado importantes pagos a las Operaciones de Mantenimiento de la Paz, apuntó la Embajadora.

Subrayó que esto ha sido posible pese a las trabas del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos, las enormes pérdidas de la pasada temporada ciclónica y la actual crisis financiera creada por los desórdenes del capitalismo neoliberal.

Núñez transmitió la preocupación de su delegación por el aumento de los gastos de la ONU en material de operaciones de mantenimiento de la paz y precisó que en esta ocasión se proponen ocho mil 200 millones de dólares para ese fin.

En su discurso ante la V Comisión, la diplomática llamó la atención acerca de que esos gastos en el acápite de mantenimiento de la paz no se comparan con los que se realizan en cuanto a asistencia en materia de desarrollo económico y social.

Comentó que para Cuba la principal garantía de la paz y la seguridad es la erradicación definitiva de la pobreza, el destierro de todo tipo de marginalización social y la consagración del derecho de los países al desarrollo.