Rocío - Xinhua.- Los gobiernos de Cuba y México buscan aunar fuerzas en el desarrollo del turismo, un renglón en el que cada parte pretende aportar beneficios a la otra, según autoridades del sector de ambas naciones, en el marco de la XXXI Feria Internacional del Turismo (FITCuba), inaugurada en La Habana desde el pasado 2 de mayo y que culminará hoy sus actividades.
En esta ocasión, FITCuba 2011 tuvo a México como invitado de honor, razón por la que la secretaria de Turismo de esa nación, Gloria Guevara, informó que estudia la posibilidad de inversiones turísticas de empresarios mexicanos en la construcción de campos de golf y la gestión de buques cruceros en la isla caribeña.
Guevara, quien sostuvo varias reuniones con el titular de Turismo de la isla, Manuel Marrero, adelantó que México "trabaja además con Cuba en un proyecto de multidestino, que incluiría viajes de turistas europeos y asiáticos a lugares de interés en ambos países".
Ambos ministros exploran las posibilidades del denominado "multidestino", de manera que visitantes de China, Rusia y otras naciones de Europa que visiten Cuba puedan trasladarse hacia alguna de las zonas arqueológicas de México.
Según la ministra mexicana, una de las prioridades de esta cooperación es el desarrollo en Cuba de campos de golf, una práctica asociada al turismo de gran lujo y en la que buscarán invertir varias empresas hoteleras mexicanas con experiencia en ese rubro.
Cuba espera construir 19 campos de golf, asociados a enclaves inmobiliarios y recreativos, una empresa en la que hasta ahora sólo participan empresarios británicos y españoles.
Según Guevara, varias empresas del estado de Quintana Roo (estado del sureste mexicano), con hoteles conectados a terrenos de golf, están interesadas en el mercado cubano, y destacó que su país "tiene una gran experiencia en ese segmento", toda vez que cuenta con 50 campos de clase mundial.
La funcionaria dijo haber hablado también con Marrero sobre el interés de la naviera mexicana "Ocean Star" para ampliar sus recorridos de cruceros a la isla, lo que coincide con otra de las líneas de trabajo del gobierno cubano.
Las posibilidades que ofrece Cuba, dijo, "son muy interesantes para cualquier inversionista", y precisó que no todas las inversiones serían en La Habana, sino también en los polos de Varadero, Jardines del Rey y Cayo Santa María, entre otros puntos.
Por su parte, Marrero ha ratificado el interés de su gobierno por el mercado turístico mexicano, pues la isla no renuncia al objetivo de recibir a más de 100.000 turistas de ese país, algo que calificó como "una asignatura pendiente".
El turismo mexicano hacia Cuba, que llegó a superar las 92.000 personas en 2007, cayó de manera abrupta en los años siguientes por la crisis financiera internacional, la devaluación del peso mexicano, la sobrevaluación de la moneda cubana y el nivel de las tarifas turísticas de la isla, que encarecieron este destino.
A esos factores se añadió la decisión cubana de suspender en 2009 el tráfico aéreo con México durante un mes, tras el estallido de la epidemia de gripe AH1N1 y, el año pasado, la crisis de la aerolínea Mexicana de Aviación.
En 2008, los turistas mexicanos que visitaron Cuba rondaron las 84.000 personas, cifra que se redujo a 61.000 en 2009, aunque el año anterior repuntaron hasta alcanzar los 66.000, según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE) de la isla.
México está entre los 10 primeros socios comerciales de Cuba, con un intercambio de 325 millones de dólares en el año anterior, cifra que superó en un 23 por ciento al comercio en 2009.
Según fuentes diplomáticas mexicanas, la inversión de empresas de esa nación en la isla es de unos 730 millones de dólares.
Cuba recibió el año pasado más de 2,5 millones de turistas, lo que significó un crecimiento del 4,0 por ciento. Para el presente año, el gobierno de esta nación se propone recibir a unos 2,7 millones de turistas, una meta que parece cercana luego de recibir en los primeros cuatro meses a un millón 178.000 vacacionistas.
