El reportero independiente Tim Pool fue testigo de las atrocidades de los uniformados, quienes en vez de mantener el orden parecían estar atizando el fuego.
"En Nueva York a la policía no le importa si tienes el pase o no. He visto cómo un efectivo agarraba a un periodista que venía pasando y lo echaba al suelo. He visto cómo los supervisores han exigido interrumpir el paso de los periodistas", comenta Pool.
También reveló que "la policía pide ser informada sobre el lugar de destino del periodista después de cubrir la historia (...), si les gustan las noticias que has divulgado te permiten pasar al lugar", sostuvo.