Este estudio empleó un modelo de regresión que comparó las tendencias en el tiempo para los años de crisis (2008-2010) con las de los años previos a la crisis (2000-2007) y encontró que entre el 2008 y el 2010 hubo 290 casos más de suicidio e intento de suicidio debido a razones económicas y atribuibles a causas económicas, reporta EFE.
"Estos resultados preliminares tienen implicaciones de política importantes", afirmó uno de los investigadores. "Los programas de austeridad diseñados para lidiar con los déficit presupuestarios causados por la crisis están causando significativo sufrimiento humano en la población en general", precisó.
Los autores describieron como "el primer movimiento popular sobre salud mental en Europa", la protesta que llevaron a cabo en mayo pasado frente a las oficinas de impuestos en Boloña (Italia) las viudas de hombres que se suicidaron, quienes alegaron que los recortes destinados a bajar el gasto gubernamental y los impuestos para incrementar la recaudación fiscal habían puesto a sus esposos en peligro.
Las tendencias generales de suicidios en Italia son coherentes con las de otros países europeos donde estos se incrementaron rápidamente desde el comienzo del colapso financiero en el 2008, de acuerdo con el estudio.