teleSUR.- Derivado de la violencia registrada en Hong Kong, un grupo de abogados solicitó a la ONU que indague presuntos vínculos del gobierno estadounidense en las protestas.

China exige a EE.UU. mantenerse al margen de sus políticas

teleSUR.-La normalidad de las actividades y la dinámica en la ciudad de Hong Kong se han ido retomando paulatinamente con la intervención de los cuerpos de seguridad de ese territorio chino.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de China exigió al Gobierno de Estados Unidos (EE.UU.) mantenerse al margen de los asuntos internos de ese país asiático, en referencia directa con la oleada de protestas que se han suscitado en la ciudad de Hong Kong.

Estas declaraciones fueron oficializadas luego que el mandatario estadounidense, Donald Trump, publicara en la red social Twitter que la administración china estaba enviando un contingente de sus tropas hacia la frontera con Hong Kong.

"Ya hemos expresado nuestra postura al respecto en más de una ocasión. Hong Kong es una cuestión que corresponde exclusivamente a la política interna de China. Volvemos a llamar a EE.UU. a dejar de meter la nariz en los asuntos de Hong Kong", exhortó la cancillería de ese país asiático.

Sin embargo, el presidente Trump se posicionó contra las declaraciones de la prensa internacional que lo vinculan directamente con la aparición de protestas asentadas en la localidad china.

"Muchos me culpan a mí y a EE.UU. por los problemas que ocurren en Hong Kong. No puedo imaginar por qué", expresó.

Las manifestaciones dentro de la ciudad de Hong Kong han tomado un tinte violento, luego de unas diez semanas de protestas en las inmediaciones del aeropuerto internacional de Hong Kong y las principales calles de esta región china.

Las autoridades chinas emitieron una orden restrictiva ante las manifestaciones que habían bloqueado y limitado en gran medida las labores aeroportuarias de ese recinto hongkonés.

Manifestantes protestan en Hong Kong bajo fuerte aguacero

teleSUR.- Fuentes oficiales hongkonesas destacan que las violentas manifestaciones han causado pérdidas millonarias al turismo de la región.

A pesar de la fuerte lluvia de este domingo en Hong Kong, miles de manifestantes salieron a las calles con sombrillas con la consigna de rechazar el proyecto de ley de extradición, mientras China reitero acusaciones contra Estados Unidos, por tener injerencia en el movimiento.

Las manifestaciones en algunos casos se han tornado violentas en la Región Administrativa Especial de China, si bien la gobernadora hongkonesa, Carrie Lam, dio por muerto al proyecto legislativo que permitía la extradición de “fugitivos” hacia Beijing.

Los manifestantes exigieron reformas políticas en Hong Kong en otra jornada de protestas que, esta vez, los propios protagonistas calificaron de pacífica.

Fuentes oficiales hongkonesas destacan que las violentas manifestaciones han causado pérdidas millonarias al turismo de la región, donde se reporta una caída en los ingresos de la industria del ocio en más de un 50 por ciento.

Las autoridades de Hong Kong llamaron a la calma y tomaron medidas para castigar a los perturbadores, lo que es apoyado por el gobierno central de China.

A estas medidas para mantener la seguridad en la región se suma la manifestación de este sábado, en la que los participantes apoyaron la gestión del gobierno local y la policía, y rechazaron la violencia de los manifestantes opositores.

El gobierno chino en una nota presentada por su Ministerio de Exteriores, acusó a EE.UU. de actuar en connivencia con criminales en las manifestaciones violentas que suceden en Hong Kong.

El documento señala a "los políticos estadounidenses de conspirar con elementos criminales radicales de la nación asiática".

La Cancillería china enfatizó que "la tergiversación de la realidad y la política ciega de dobles estándares por parte de los políticos estadounidenses rayan la histeria".

"Cualquier intento de contener el desarrollo de China, socavar la prosperidad de Hong Kong y el principio de 'un país, dos sistemas" será rechazado con contundencia por todo el pueblo chino y nuestros compatriotas de Hong Kong", recalcó la institución.

China exigió a Estados Unidos parar la venta de armas a Taiwán

Caracas, 17 de agosto. Noticias24.- El gobierno de la República Popular de China denuncia que la venta por Estados Unidos (EE UU) de cazas F-16 a Taiwán constituye una injerencia «en los asuntos internos de China» y «socava la soberanía» de esa nación, informó Hispantv.

Su portavoz, Hua Chunying se mostró en desacuerdo con la aprobación que hiciera EE UU el pasado viernes, del programa, el cual está valorado en 8 mil millones de dólares y expresó que con tal decisión, Washington «interfiere en los asuntos internos de China» y «socava la soberanía y los intereses de seguridad» del gigante asiático.

Además, la diplomática china resaltó que la cuestión de Taiwán, una isla a la que Pekín considera como parte integral de su territorio, «concierne a la soberanía e integridad territorial de China».

En ese mismo orden, la portavoz Hua Chunying llamó a la parte estadounidense a respetar el principio de ‘Una sola China’ y cumplir con los tres comunicados conjuntos firmados por los dos países que reglamentan las relaciones entre Pekín y Washington.

De igual modo, la vocera de la Cancillería china urgió al gobierno de EE UU a detener lo antes posible la venta de armas y cualquier contacto militar con Taiwán, de lo contrario, sufriría consecuencias, advirtió.

Es de señalar que, el programa, que incluye la venta de 66 aviones de combate F-16, la instrucción de pilotos y el mantenimiento de los cazas, debería ser revisado por el Congreso norteamericano.

El Departamento de Defensa de EE UU (el Pentágono) dijo el viernes en un comunicado que esta venta reafirma el compromiso de Washington con la seguridad y la estabilidad de Taiwán que vive relaciones tensas con China debido a la creciente actividad de las fuerzas secesionistas en la isla.

El Pentágono, que pasa por alto las advertencias de China aprobó además en julio equipar a Taiwán con 108 tanques, 250 lanzamisiles tierra-aire y otro tipo de armamentos por un valor estimado de 2200 millones de dólares.

Refiere la agencia que las autoridades chinas han estado haciendo advertencias al gobierno de los Estados Unidos, de no jugar con fuego al apoyar a Taiwán y dejado muy claro que Pekín está dispuesto a ir a una guerra para evitar una eventual separación de la isla.