Juventud Rebelde.- Un sangriento fin de semana con más de 70 muertos y una veintena de heridos fue el panorama que dejó atrás la secretaria de Estado norteamericana, Condolezza Rice, en su visita a esta capital, informa hoy PL.
Mientras, fuentes oficiales cifran este lunes en casi una centena las víctimas de los enfrentamientos y bombardeos de los dos últimos días, Rice felicitó al gobierno iraquí por los avances en la seguridad.
A su llegada el domingo a Bagdad la diplomática norteamericana se encontró con un ultimátum del clérigo chiíta Muqtada al Sader, que advierte una guerra abierta si las tropas extranjeras no inician el retiro paulatino del país.
Por su parte, el gobierno iraquí declaró que no negociará con al Sader y seguirá la ofensiva contra sus milicias.