Granma.- Los crecientes precios de los cereales afectan cada vez más a los países más pobres, y en 37 de ellos ya se ha desatado una crisis alimentaria, señala un informe presentado hoy en Roma por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), según DPA.
En diez países de África y Asia, este problema ya ha ocasionado disturbios. En Paquistán y Tailandia, el ejército se encarga de evitar robos y saqueos en los campos de cereales y los almacenes.
Ante esta situación, la FAO insta a todos los donantes e instituciones financieras a aumentar su ayuda para los países más afectados. Estos necesitarían entre 1 200 y 1 700 millones de dólares.