José Luis Centella - El Siglo de Europa.- Apenas unos días antes de dejar el poder, la Administración de Donald Trump ha tomado la escandalosa decisión unilateral de incluir a la República de Cuba en la polémica lista de Estados «patrocinadores del terrorismo mundial”. Esta imposición va mucho más allá de una declaración testimonial, ya que contiene medidas muy concretas que afectan a normas internacionales: desde impedir a Cuba acceder a préstamos del FMI o mantener relaciones con otras instituciones económicas internacionales, hasta la eliminación de los ‘duty-free’ de productos cubanos, pasando por suspensiones en la cobertura de las aseguradoras internacionales sobre bienes situados en suelo cubano.