Tiempo de Cuba.- El pasado 20 de Septiembre nos dejó un inolvidable compañero en la lucha por la solidaridad con Cuba: el artista plástico y militante de la izquierda revolucionaria “Ché” Durán. Nacido en Argentina, llevaba largos años establecido en Torremolinos (Málaga) y su actividad en los campos artístico, cultural, político y social ha sido constante en toda la provincia. Miembro durante muchos años de la Junta Directiva de la Asociación de Amistad Hispano-Cubana de Málaga y Vicepresidente de la misma hasta poco antes de su fallecimiento.

Si Bertold Brech decía que los hombres que luchan toda su vida eran “Los imprescindibles”, Ché era indudablemente uno de ellos; con más de ochenta años y tras una penosa enfermedad continuaba fiel a los principios que orientaron toda su vida: su concepción del arte y la cultura como derecho del pueblo, su preocupación por estimular la creatividad espontánea del niño, su compromiso solidario con todos los pueblos de la tierra (con especial hincapié en la Revolución Cubana), en definitiva, su militancia activa por un mundo mejor.

Nacido en Argentina (su apelativo de “Ché” recuerda ese origen, pero también su admiración hacia Ernesto Guevara), llevaba largos años establecido en Torremolinos (Málaga) y su actividad en los campos artístico, cultural, político y social ha sido constante en toda la provincia. Miembro durante muchos años de la Junta Directiva de la Asociación de Amistad Hispano-Cubana de Málaga (A.D.A.H.C.) y Vicepresidente de la misma hasta poco antes de su fallecimiento, donde fue constante su actividad en todos los aspectos (pero con especial énfasis en aquellos en que el arte y la cultura se utilizaban como instrumento para desarrollar sus fines), ni la edad, ni la enfermedad fueron obstáculo para su entrega abnegada a la defensa de Cuba y su Revolución

Su ánimo, alegre siempre, debe servirnos de ejemplo para preservar con firmeza y optimismo en todas las justas luchas que fueron el motor de su vida.

¡Hasta siempre, compañero!