Y todo, por supuesto, por salvaguardar a la Revolución cubana cuyos logros en estos 50 años son los sueños de la gran mayoría de los pueblos del mundo, afirmó el activista.

En la apertura del encuentro, ayer sábado, el vicepresidente primero del Instituto  Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), Enrique Román, impartió una conferencia magistral en la que puntualizó aspectos esenciales por los cuales el triunfo de 1959 era impostergable.

Mencionó, entre ellos, el alto nivel de analfabetismo, los ínfimos indicadores de salud, la desigual distribución de las riquezas y las pésimas condiciones de vida de la población rural.

Sólo por erradicar esos flagelos - aseguró en su conferencia - la Revolución en Cuba había que hacerla.

En declaraciones exclusivas a Prensa Latina, el vicepresidente primero del ICAP destacó el valor de los movimientos de solidaridad con la isla que existen en el mundo.

Puntualizó que el ICAP no privilegia a ninguna organización de este tipo sobre otra, aunque sí le dan atención según las peculiaridades de cada país.

Sobre el de México, dijo que no es ajeno "a los tremendos lazos históricos que han existido siempre ente nuestras dos naciones, una historia precisamente de solidaridad".

¿A quién le reveló José Martí lo más profundo de sus designios, lo más íntimo de las razones de su lucha?, a un amigo mexicano, a Manuel Mercado.

¿Para Dónde fue Mella cuando tuvo que salir de Cuba?, para México, donde lamentablemente encontró la muerte, pero donde quedó para siempre su pensamiento.

¿Para dónde fue Fidel y de dónde salió Fidel?, para México y con el concurso de los mexicanos.

Pero los nexos comunes también abarcan otros terrenos que nos hacen muy cercanos, destacó Enrique Román.

Hay una historia muy rica, muy amplia también en la cultura. Pese a los orígenes que nos diferencian, la contigüidad cultural entre los dos países es especial.

Y esos lazos culturales se dan quizás como no pasa con muchas naciones de América Latina, aseguró Román y subrayó que por ahí, por la historia y la cultura, viene encauzado este Movimiento de Solidaridad.

Por ello es que cada una de sus reuniones es un motivo importante de atención del ICAP, dijo.

Román enfatizó que la organización mexicana cobró auge en el momento que Cuba más lo necesitaba, en los años de la década de 1990, una de las etapas más complejas para el pueblo cubano.

En esos momentos se crearon dentro del movimiento agrupaciones nuevas como Va por Cuba y se empeñaron en enviarnos un barco cargado de petróleo a partir de colectas populares, algo realmente bonito y muy genuino.

Con todos estos elementos, recalcó, hay razones suficientes para tener una distinción especial con el Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba.

Sobre la coincidencia de este XIV Encuentro Nacional con el 50 aniversario de la Revolución cubana y el espíritu de renovada lucha que han evidenciado en esta cita, Román dijo que para los mexicanos la revolución es algo muy cercano.

Relató que se logró en un período de tiempo relativamente corto a pesar de la intensidad de la lucha.

Los mexicanos que despidieron el Granma casi no tuvieron tiempo de reponerse de la emoción de aquel momento cuando supieron que ya los expedicionarios habían ganado la guerra   .

Eso también hizo a muchos mexicanos sentirse muy cerca de Cuba y de su proceso revolucionario. Es una historia cargada de mucho simbolismo, dijo.

Resaltó que por eso es natural que se dé este tipo de encuentro que va más allá de las ideologías de quienes integran el movimiento.

México es un país de muchos hermanos y por eso ninguna desavenencia con algunos gobiernos mexicanos ha podido empañar estos lazos. Por suerte, ya resuelta hoy.   

Es por eso, dijo Román, con esta celebración que coincide con el 50 aniversario de la Revolución cubana, los mexicanos están celebrando algo que también les pertenece porque la sienten suya.