La cita artística, a la que asistieron las madres y esposas de los Cinco, fue también un agasajo a la esperanza de Irma, Magalys y Mirtha, que desean ver a sus hijos libres; a la fortaleza de Olga, Rosa Aurora y Elizabeth, quienes han tenido que enfrentar sin sus esposos la crianza de sus pequeños; y al amor de Adriana que espera por aquellos que han de nacer.
«Ha sido muy emotivo este espectáculo, especialmente por la carta de Adriana y los versos de Tony —comentó a JR Irma, la madre de René—, y a la vez necesaria para que se conozca cuánto dolor hemos tenido que sufrir durante estos diez años. He sido muy feliz disfrutando de una generación tan joven y capaz de hacer cosas finas y hermosas».
