Prensa Latina.- El canciller cubano, Bruno Rodríguez, afirmó aquí que el recorrido que realizó por países de la región y finalizó hoy en Angola forma parte de convicciones profundas de cooperar con el continente africano.

Rodríguez dio punto final en esta capital a una gira que tuvo su primera escala en Etiopía, después siguió a Islas Seychelles, Sudáfrica y Zimbabwe.

"África, en particular la región subsahariana, está siempre en nuestros corazones. Sentimos una deuda de gratitud con este continente y cooperar es parte de nuestras convicciones más profundas", declaró a Prensa Latina el jefe de la diplomacia.

Explicó que se pretende "contribuir de una manera modesta con los objetivos de paz, desarrollo y justicia social en esta región que tiene tanta proximidad cultural a Cuba, a nuestra sangre, a nuestros antepasados, a la tradición de lucha por la independencia y abolición de la esclavitud".

Cuba, actualmente presidenta de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, tiene el importante propósito de estrechar las relaciones con la Unión Africana, precisó el ministro.

Puntualizó que en el recorrido se constató un nivel de progreso y de excelentes relaciones, así como de gran admiración y cariño por la pequeña isla de Cuba.

Agregó que ese reconocimiento brotó por la contribución cubana al desarrollo de estos pueblos y porque Cuba es un país independiente que puede hablar con voz propia, y en los escenarios internacionales defiende intereses que son también africanos.

El canciller efectuó una visita oficial de tres días a Angola, edurante la cual sostuvo conversaciones con diferentes autoridades para vigorizar los nexos de amistad y cooperación.

Luanda y La Habana cumplieron el pasado 15 de noviembre 38 años de establecer relaciones diplomáticas, cinceladas por una historia solidaria y mutua voluntad política de sus gobiernos de bregar por su fortalecimiento y diversificación.

El actual presidente angoleño, José Eduardo dos Santos, en aquel momento canciller, rubricó en esa fecha el arreglo de formalizar esos vínculos que revalidó el embajador cubano Oscar Oramas, solo a cuatro días de declarada la independencia en esta nación africana.