Juventud Rebelde - Video: Russia Today.- Durante la sesión plenaria de la VII Cumbre de las Américas el mandatario ecuatoriano denunció la permanencia del bloqueo a la Mayor de las Antillas así como el decreto del presidente Barack Obama contra Venezuela.

Como un evento histórico en el que ha triunfado la dignidad, al poder contar con la presencia de Cuba, calificó el presidente ecuatoriano Rafael Correa la realización de la VII Cumbre de las Américas.

Correa subrayó que Cuba es un país que tiene todo el derecho y la moral para ser miembro en esta cita, denunció la política injerencista del gobierno estadounidense con la política de bloqueo a la nación caribeña, y exigió la devolución del territorio Guantánamo a la Isla.

Manifestó su oposición, junto a otros países, a la orden de Obama contra Venezuela que viola el derecho internacional de esa nación sudamericana, pues la respuesta de la región ha sido contundente.

Señaló que si se quiere hablar de derechos humanos se debe ir a las realidades de la región. Ecuador, según la CEPAL, dijo, es de los países que más ha reducido los índices de pobreza, una nación donde no hay torturas ni penas de muertes.

Dijo que la Celac debe ser el foro para las discusiones latinoamericanas y caribeñas, y que este mecanismo integrado debe servir para el debate con América del Norte, como una sola voz.

Correa hizo un análisis de las diferencias de puntos de vista y las grandes manipulaciones que existen con relación a temas como la democracia, los derechos humanos y la libertad de prensa.

En este sentido apuntó que el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, con sede en Washington, violenta los verdaderos principios cívicos y soberanos de las naciones, y que es hora de tener un Sistema Latinoamericano de Derechos Humanos.

El mandatario denunció el papel manipulador de las élites latinoamericanas, que son incapaces de comprender que la igualdad de condiciones es para todos.

El líder de la Revolución Ciudadana denunció las hegemonías mediáticas que proclaman una falsa libertad de prensa, y cada vez se quedan más desenmascarados, pues ya no tienen impunidad para manipular la verdad.

Exhortó a los presidentes y representantes de los países presentes en la magna cita a una equidad para la prosperidad, para la soberanía y la dignidad.

Aseguró que ha llegado la hora para la segunda y definitiva independencia de América Latina, un momento en el que nuestros pueblos nunca más aceptarán la injerencia y la intervención de su derecho y la independencia y la dignidad.

Correa había advertido que la paz no es solo ausencia de guerra, pues la pobreza es una bala cotidiana en contra de la humanidad.

Presidente Correa: América Latina no aceptará más tutelaje ni intervención contra sus pueblos

Daniel Rojas, enviado especial

Panamá, 11 Abr. AVN.- Los Gobiernos de América Latina y el Caribe no aceptarán nunca más la tutela, la injerencia ni la intervención contra sus pueblos, "porque su memoria está lacerada por la violencia y abusos" que en el pasado atentaron contra la libertad de prensa, Derechos Humanos o la misma democracia. Tras ese pasado inmediato, la región está llamada a garantizar la unión, a fin de alcanzar la verdadera equidad para la prosperidad, con soberanía y dignidad.

Con esta integracionista idea, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, se pronunció este sábado en la VII Cumbre de las Américas, que tiene lugar en el Centro de Convenciones Atlapa, en la ciudad de Panamá, para reiterar su posición adversa a las continuas pretensiones injerencistas y colonialistas de Estados Unidos hacia las naciones del mundo, y más recientemente en la región con la orden ejecutiva firmada, el pasado 9 de marzo, por su homólogo norteamericano, Barack Obama, en la que califica a Venezuela "como una amenaza extraordinaria e inusual" para la seguridad nacional y política exterior de Estados Unidos.

"La respuesta que ha dado la región ha sido contundente rechazando la orden ejecutiva y pidiendo su retiro. Nuestros pueblos nunca más aceptarán la tutela, la injerencia ni la intervención, porque su memoria está lacerada por la violencia y abusos del pasado. Panamá es un buen ejemplo de aquello con la invasión de diciembre de 1989 que provocó miles de muertes para sacar al sangriento dictador que los mismos invasores (Estados Unidos) habían apoyado", apuntó Correa, en relación a la captura del presidente de Panamá, General Manuel Antonio Noriega, a quien acusaba la Casa Blanca de narcotraficante.

En rechazo a este mencionado decreto, desde el 09 de marzo, Venezuela ha sido respaldada por los países miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Mercado Común del Sur (Mercosur) y Petrocaribe. Así como por el Grupo de los 77 más China y el Movimiento de Países no Alineados, que agrupa a 120 naciones del mundo.

Correa explicó que la historia reciente da cuenta de cómo en la Guerra Fría se sometía a la región a los enfrentamientos más sangrientos, sin importar las libertades de prensa, derechos humanos o la democracia, como sucedía anteriormente con el combate contra el comunismo y como sucede, en los tiempos recientes, con el argumento de la supuesta defensa de los Derechos Humanos; "lucha" que mantiene solapada la intención de invadir naciones para la apropiación ilegítima de sus recursos naturales.

Por otra parte, al abogar por la paz, el Presidente ecuatoriano aclaró que esta no solo se logra con la ausencia de guerras, sino con el desarrollo de políticas sociales que erradiquen la pobreza, para dignificar a los pueblos de la zona.

"La paz, queridos amigos, no es solo ausencia de guerras. Tanta opulencia, de unos pocos en América Latina al lado de la más intolerable pobreza, es también una bala cotidiana en contra de la dignidad humana. Por ello, creo que el lema de la Cumbre en lugar de 'Prosperidad con equidad', debería ser 'Equidad, justicia para la prosperidad'", dijo Correa.

Igualmente, celebró la asistencia, por primera vez, de Cuba en la Cumbre de las Américas, evento que calificó como "histórico", aunque puntualizó que el verdadero triunfo de toda América ocurrirá cuando Washington acabe con el bloqueo económico y financiero que durante más de 50 años ha afectado a la isla antillana y devuelva a ese pueblo Guantánamo, actual territorio ocupado por Estados Unidos.

Sistema Latinoamericano de Derechos Humanos

Para profundizar la defensa y el acatamiento de los tratados regionales en materia de Derechos Humanos, el mandatario ecuatoriano propuso la creación de un Sistema Latinoamericano de Derechos Humanos.

Correa explicó que debido a que son los países de esta región los que han suscrito el Pacto de San José, en consecuencia, "somos los únicos que reconocemos y nos sometemos a la Corte Interamericana" y destacó que Ecuador es uno de los siete países del hemisferio que han suscrito absolutamente todos los instrumentos interamericanos de derechos humanos.

Dijo que la OEA ha sido "históricamente capturada por intereses y visiones de América del Norte, y sus sesgos y atavismos acumulados la vuelven ineficiente y poco confiable para los nuevos tiempos que viven Latinoamérica y El Caribe".

Al respecto, pidió coherencia y planteó que solo deberían participar en las diferentes instancias los países que hayan ratificado la Convención Interamericana de Derechos Humanos, que no ha sido suscrita por Estados Unidos.

Sostuvo que es la Corte de San José la que puede y debe juzgar los atentados a los derechos humanos y no la Comisión con sede en Washington, ente al que calificó de innecesario.