Alberto  Mas, corresponsal de Cubainformación en Buenos Aires.-  Se rindieron en Argentina diversos homenajes al patriota latinoamericano y Apóstol de Cuba José Martí, algunas en forma virtual, otras presenciales como en el Jardín  de los Poetas en los bosques de Palermo de Buenos Aires y frente a la Embajada de Cuba.

El miércoles por una plataforma virtual, se inició la jornada  de homenajes a Martí en el 168 aniversario de su nacimiento, en una actividad que contó con la organización de la Unión de Residentes Cubanos en la Argentina (URCA), la Asociación de Unidad de Nuestra América (AUNA) y el Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba (MAS Cuba)

Este jueves 28, en un acto protocolar, la Embajada de Cuba depositó una ofrenda floral en el busto de José Martí que se encuentra emplazado en el Jardín de los Poetas, en el Rosedal de Palermo, participaron también autoridades del gobierno argentino, representado por el ministro de Cultura de Argentina, Tristán Bauer, quien rindió tributo al prócer independentista y Héroe Nacional de Cuba.

En la turística ciudad de  Mar del Plata se encuentra una plazoleta frente al mar que lleva el nombre del Héroe de Cuba, allí también se realizó acto recordatorio, mientras durante el día en las redes sociales y medios de comunicación no hegemónicos nacionales y locales homenajearon al Apóstol cubano.

El hombre, el cronista, el poeta, el político y el ideólogo de la unidad fue recordado, y sus palabras no pierden actualidad.

"Los grandes derechos no se compran con lágrimas, -sino con sangre. Las piedras del Morro son sobrado fuertes para que las derritamos con lamentos, -y sobrado flojas para que resistan largo tiempo a nuestras balas” (24-01-1880)

“Es la hora del recuento y de la marcha unida y hemos de andar, en cuadro apretado, como la plata en las raíces de los Andes” (10-01-1891)

"Trincheras de ideas valen más que trincheras de piedra" (1891)

Por la tarde diversas organizaciones políticas, sindicales y sociales que componen el Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba, con las limitaciones que impone la pandemia del covid-19, realizaron un acto frente a la Embajada de Cuba. Participaron representantes de la Central de Trabajadores de Argentina (CTA-A) y de los Trabajadores (CTA-T), del Partido Comunista, del Movimiento Evita, de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), La Garganta Poderosa, Sindicato de Obreros Curtidores, Movimiento Territorial de Liberación (MTL), Asociación Taxistas de Capital (ATC), Casas de la Amistad Argentina-Cuba de Buenos Aires, La Matanza, Quilmes, Avellaneda, Zona Norte, Agrupación 13 de Abril, Org. Social y Política Los Pibes, entre otras.

Una multitudinaria militancia con banderas, carteles, redoblantes, bombos, trompetas y una calle ocupada por el amor a la Revolución Cubana, esa revolución inspirada en Martí, a quien Fidel, nombrara como el autor intelectual de la Revolución, el único autor intelectual del asalto al Moncada, el Apóstol de la independencia de Cuba.

 El Embajador Pedro Pablo Prada agradeció a los participantes en la actividad y desde las puertas de la Embajada afirmó que “representan lo más genuino del alma argentina”, definiendo a José Martí como “El Apóstol de América, el hombre que nos enseñó a creer que Patria es Humanidad”

Finalmente  un grupo de jóvenes ingresaron al patio del territorio cubano en la Argentina e hicieron depósito de un ramo de flores en el busto de Martí que se encuentra en la delegación diplomática.

Martí es el gran constructor de esa amistad entrañable que une a los pueblos de Argentina y Cuba, cuando en los años 1890 y 1891 ejerció el cargo de Cónsul en Nueva York, nombrado por el presidente Miguel Juárez Celman, o como corresponsal del diario La Nación desde 1882 a 1891, también desde los EE.UU., además de mantener estrechas relaciones con políticos argentinos como Roque Saenz Peña, el autor de la ley electoral que puso fin a décadas de fraude y exclusión en Argentina, y a quien conociera en el Congreso Panamericano en Washington donde Saenz Peña defendió el principio de no intervención de las potencias extranjeras en los asuntos internos de los estados latinoamericanos (doctrina Monroe) y acuñara la frase «América para la humanidad».