El acto tuvo lugar en la Plaça de l’Ajuntament de la capital con la presencia de su editor José A. López Camarillas y de María Pardo de la Asociación Valenciana de Amistad con Cuba José Martí.
La novena edición de la Plaça del Llibre de València acogió la presentación del libro Lucia Jérez, del escritor cubano José Martí, que ha sido traducido al valencià por primera vez, a cargo del profesor y editor José A. López Camarillas. La actividad tuvo lugar en la Plaça de l’Ajuntament de la capital del Túria el pasado 29 de octubre por la tarde, con la presencia de su editor José A. López Camarillas y de María Pardo de la Asociación Valenciana de Amistad con Cuba José Martí. Por su parte, estuvo entre el público una descendiente directa de un tío de Martí, Marga.
Esta edición de Lucia Jérez cuenta con un prólogo coral del propio editor y de otras firmas como Jordi Sebastià, escritor y periodista, Luis Fernández, escritor y divulgador especializado en cartografía y toponimia, Felip Bens, escritor y periodista, Vicent Baydal, profesor en Historia del Derecho de la Universitat Jaume I de Castelló, Esther López, historiadora y divulgadora literaria, David Rodríguez, miembro de la Asociación Valenciana de Amistad con Cuba José Martí y miembro de honor de la Fundación Nicolás Guillén de Cuba, Toni Mejías, periodista y componente del grupo Los Chikos del Maíz, y de Marlene Vázquez, directora del prestigioso Centro de Estudios Martianos de La Habana, en Cuba.
La obra teórica de José Julián Martí Pérez, Héroe Nacional, Libertador y Apóstol de la Independencia de Cuba, constituye un aporte fundamental a la Cultura Universal. En su corta pero intensa vida dejó numerosos escritos filosóficos, pedagógicos, políticos, periodísticos y literarios. En Cuba, Martí inspiró a la Generación del Centenario, encabezada por Fidel Castro Ruz, que el 26 de julio de 1953 organizó los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes para derribar la dictadura de Fulgencio Batista, y que a pesar del fracaso de la acción, desencadenó todo un movimiento por la independencia y la libertad de la isla. La Revolución Cubana es hija de las ideas martianas en gran medida. Los textos martianos son todos ellos de una profunda implicación práctica que trascendieron las luchas por la independencia y la justicia social del pueblo cubano, para ser útiles a otras causas justas en otras latitudes. No en vano a Martí se le conoce como el más universal de todos los cubanos. Por tanto, el conocimiento y estudio del legado martiano constituye una necesidad.
Lamentablemente, fuera de Cuba y de América Latina, a José Martí no se le conoce ni se le valora como se debiera, ni en su faceta política ni en la literaria. Este silencio consciente es consecuencia en parte de la rémora nostálgica colonial española (Martí fue el libertador de Cuba frente al colonialismo español), y en parte por el discurso y la praxis radical y crítica de Martí ante la injusticia y la explotación, que resulta a veces incómoda para la Academia.
En València se recuerda la presencia de José Martí en apenas tres lugares: una placa conmemorativa en la casa donde residió siendo niño junto a su padre en C/ Tapinería, colocada en 2003 por la Asociación Valenciana de Amistad con Cuba José Martí en el 150 aniversario de su nacimiento con la presencia de la entonces embajadora Isabel Allende Karam (la placa está colocada en el edificio por el lado de la plaza del Miracle del Mocadoret); un monolito en los jardines centrales de la Avda. Blasco Ibáñez a la altura del número 134, con un bajo relieve con el rostro del Héroe Nacional y un fragmento del poema Cultivo una Rosa Blanca, colocada en 1993 por el Ayuntamiento de València; y una pequeña y casi perdida calle con su nombre. Es evidente que seguimos en deuda con Martí, sobre todo en el ámbito de la difusión de su pensamiento y su legado práctico.
La aportación literaria de José Martí al modernismo es conocida por sus versos libres y versos sencillos, algunos aquí recogidos, pero no tanto por su novela Lucía Jérez. Ahora se puede disfrutar de esta obra precursora del modernismo hispano-americano, en una edición de textos martianos traducidos por el filólogo José A. López Camarillas a la lengua propia de la tierra del padre del escritor, el valenciano Mariano Martí. López Camarillas salda así en parte esa deuda con el poeta, novelista, político y revolucionario cubano. Se trata de una lectura que seguro invitará a conocer también al autor en el contexto literario e histórico que le hizo convertirse en una persona íntegra y de alcance universal.
Camarillas (València, 1989) trabaja como profesor de literatura en institutos públicos. Además de traducir a José Martí, Miguel Hernández y Blasco Ibáñez al valencià, ha colaborado con articulos e investigaciones sobre cultura y memoria en diferentes revistas como Lletraferit o Descubir el arte.
A pesar de que el poeta José Martí fue cubano —nadie lo duda—, nos pertenece una pequeña parte de su identidad. No en balde, era hijo de un valenciano y tenía sus raíces en una familia valencianohablante de Campanario (ahora parte de la ciudad de València). Además, es conocido que Martí pasó parte de su infancia en la calle Tapineria en el centro de la ciudad del Turia.
Más allá de la familia, los vínculos con nuestra literatura también son fuertes. No es casual que La rosa de papel de Vicent Andrés Estellés, uno de los poemas más conocidos de nuestra literatura, esté dedicado directamente al revolucionario cubano.
Lucía Jérez, es precursora del modernismo en castellano y única novela de José Martí. A pesar de que el modernismo catalán es un movimiento diferenciado del modernismo hispánico, es evidente que entre los autores de los dos movimientos hubo comunicación y retroalimentación.
Como periodista y traductor de Poe, Helen Hunt Jackson, Lord Byron o Victor Hugo, José Martí fue fundamental para enriquecer la literatura hispánica con las vanguardias francesas, británicas y norteamericanas de la época, especialmente el estilo del verso libre de Walt Whitman, que él también adoptó a Versos libres y del cual beben Juan Ramón Jiménez, García Lorca o Miguel Hernández.
Lucía Jerez o Amistad funesta es la primera y única novela conocida de José Martí. Escrita en 1885, se considerada junto con Azul… de Rubén Darío (1888) como la obra precursora del modernismo latinoamericano. También hace una gran aportación a la literatura del momento por el desarrollo psicológico de los personajes, la naturalidad de sus diálogos, la crítica social que lanza, las constantes referencias a otras obras literarias y artísticas, la ambientación en América Latina, la presencia del simbolismo y del parnassianisme y, sobre todo, la inauguración de la prosa artística.
Para más información contactar en brigadas.cuba@gmail.com
Asociación Valenciana de Amistad con Cuba José Martí
València, 3 de noviembre de 2021