Prensa Latina.- La organización estadounidense Codepink impulsa una campaña con el objetivo que el gobierno de Estados Unidos saque a Cuba de su espuria lista de países patrocinadores del terrorismo.
En declaraciones a Prensa Latina, vía WhatsApp, Samantha Wherry, quien trabaja en esa organización no gubernamental internacionalmente activa en pos de poner fin a las guerras y ocupaciones financiadas por Estados Unidos, explicó que iniciaron una nueva campaña internacional en solidaridad con el pueblo cubano.
“Estamos exigiendo que el presidente Joe Biden levante la designación de Cuba como Estado Patrocinador del Terrorismo”, explicó Wherry, quien es de origen colombiano y reside en Estados Unidos.
Explicó que los objetivos de la iniciativa son presionar a la administración de Biden para que saque a Cuba de la lista, sensibilizar a la opinión pública y a medios de comunicación estadounidenses sobre las consecuencias de formar parte de esta lista.
Además, fortalecer el trabajo de solidaridad con Cuba en Estados Unidos y crear un apoyo amplio en toda Nuestra América para cambiar la política de Washington hacia Cuba, añadió Wherry.
“Entendemos que esta designación no es más que un acto político por parte del ex presidente Donald Trump para complacer a los cubano-americanos conservadores”, enfatizó.
Recalcó que este acto político tiene repercusiones serias para el pueblo cubano al limitar su capacidad de realizar transacciones financieras para combatir la pandemia de la Covid-19 y reactivar su economía.
“Biden, quien prometió revisar la designación de Cuba como Estado Patrocinador del Terrorismo, podría aliviar las restricciones financieras y comerciales de este país con tan solo una firma”, aseveró.
Subrayó que el inmenso poder del gobierno estadounidense sobre el sistema financiero mundial hace que los bancos y los comerciantes se nieguen a hacer negocios con Cuba porque temen a las represalias del gobierno estadounidense si no se cumplen con las restricciones, en virtud del bloqueo económico, financiero y comercial y su carácter extraterritorial.
“La designación de Cuba como patrocinador del terrorismo es cínica e hipócrita”, remarcó la activista de la reconocida organización Codepink.
En 2015, el expresidente Barack Obama sacó a Cuba de la lista en la que llevaba desde 1982 y en la que nunca debió estar, decisión revertida por Trump el 12 de enero de 2021.
El entonces secretario de Estado Mike Pompeo justificó la cuestionada y condenada inclusión, en la negativa de Cuba a extraditar a miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que avanzaban en un proceso de paz en La Habana.
El gobierno del expresidente Iván Duque (2018-2022) exigió la extradición de los líderes del ELN luego de un atentado en academia policial en una escuela policial.
Esa exigencia del entonces gobierno colombiano se hizo a pesar de conocer de la existencia de protocolos diseñados y acordados por las partes con atención estricta a las disposiciones del derecho internacional para la solución de conflictos armados internos, incluido el protocolo para el evento de la ruptura de las conversaciones.
“Como organización que ha condenado la guerra híbrida de Estados Unidos contra Cuba, exigimos el fin del bloqueo, la eliminación de las sanciones de Trump y elevamos la increíble solidaridad internacional que muestra Cuba”, reiteró.