Noel Manzanares Blanco – Cubainformación. – Un Magisterio acerca de cómo abordar problemas peliagudos para la educación, desde la perspectiva familias-institución escolar
Un año atrás consigné/consigno que, por tener que darle primacía a determinadas actividades profesionales, estaba/estoy obligado a mermar mi labor mediática —y ofrecí/ofrezco disculpas a mis lectores/as. No obstante, compartí una serie de posts acerca del acontecer palpitante en la Mayor de las Antillas —y no obvié otros asuntos. Así, firmé el rótulo “Cuba: el pulso en el 2021” cuyo primera versión socialicé en febrero de 2021 (1).
Entretanto, compartí las series “Cuba: Miradas al Anteproyecto del Código de las Familias” (2, 3, 4, 5) y “Cuba: nuevo Anteproyecto del Código de las Familias” (6, 7, 8, 9); y al cierre de diciembre de 2021 rubriqué la última versión del rótulo anteriormente mencionado (10).
Ahora —después de recibir un “reproche” de un colega por no leer nada mío en Cubainformación en lo que va de 2022—, decidí firmar este post a la luz del mensaje principal que dejé a finales del año pasado, de la extraordinaria acogida de la serie televisiva Calendario y de la necesidad de expresar mi sentipensamiento de cara al debate por el Proyecto del Código de las Familias (11).
Para evitar equívocos, ratifico mi adhesión absoluta a mi Patria, su Revolución y su Socialismo; mi adhesión absoluta a las ideas de Marx, Engels y Lenin; y mi adhesión absoluta a las sabias de Martí y Fidel. Simultáneamente, ratifico mi identificación absoluta con los principios de nuestro Partido Comunista, con las orientaciones de Raúl y con el quehacer de Díaz-Canel.
Si alguien tiene duda de lo que acabo de manifestar, invito a consultar “Cuba: Díaz-Canel, Revolución (6)/ Al margen del neoliberalismo, con resolución frente el 11/07, ponderando la solución de las contradicciones y estableciendo definiciones guía del actuar revolucionario” (12); un trabajo que complementa las ideas que siguen:
Miguel Díaz-Canel Bermúdez revitaliza el Proceso de Rectificación de los años ochenta del siglo XX (13); vigoriza la percepción martiana del deber ante la Patria para dinamizar la edificación/irreversibilidad de nuestro Socialismo (14); trabaja a tono con el legado de Fidel y las orientaciones de Raúl (15); encabeza la continuidad de nuestra obra liberadora (16); y deja su huella ante la Covid-19 (17) —entre otros aspectos.
Con estos presupuestos —mientras que invito a meditar sobre las reflexiones que contiene “Calendario: 'Verdades verdaderas'. Entrevista a Magda González Grau” (18)—, aprecio que es mucho lo que el pueblo cubano agradece del grueso del contenido presente en lo que devendrá Código de las Familias. Pero —como toda obra humana está sujeta a perfeccionamiento—, puede/debe mejorarse. Por ello, resalto:
I. Considero que las ideas expresadas en los debates deben someterse a votación con la finalidad de registrar cuántas personas están o no de acuerdo, sin que así se deje de recoger cada planteamiento. El asunto pasa por garantizar elementos que coadyuven a confirmar la voluntad mayoritaria, en caso que sea preciso. Todo, en correspondencia con el artículo 101, inciso g) de nuestra Constitución (19).
II. Considero que, en base a ese artículo e inciso, acerca del matrimonio se debe respetar la voluntad mayoritaria reflejada en los debates del Proyecto de la actual Carta Magna o sea, tener en cuenta que a los diputados/as se les informó sobre los resultados de la consulta popular de ese Proyecto:
“Artículos y temas más comentados/ 1. El artículo 68, relacionado con la institución del matrimonio, recibió 192 mil 408 opiniones, el 24.57% del total de la consulta y fue mencionado en 88 mil 66 reuniones (66%). La mayoría propuso sustituir la unión concertada entre dos personas y volver a que sea entre un hombre y una mujer como está en la actual Constitución [de 1976]” (20).
III. Considero que debe suprimirse el concepto de “Responsabilidad parental” y en su lugar dejar el de “Patria potestad”, si “En realidad, la Responsabilidad parental como término, no cambia nada para todos lo que están enfocados en la tarea de educar, disfrutando la crianza y con conciencia de la responsabilidad contraída” (21). En última instancia, madres y padres tenemos la máxima responsabilidad en el devenir de nuestros hijos/as.
IV. Considero que ha de relativizarse el “Artículo 5. Derechos de la infancia y la adolescencia en el ámbito familiar./ 1. La familia es responsable de asegurar a las niñas, los niños y adolescentes, el disfrute pleno y el ejercicio efectivo de sus derechos a: a) Ser escuchados de acuerdo con su capacidad y autonomía progresiva y a que su opinión sea tenida en cuenta;/ b) la participación en la toma de las decisiones familiares que atañen a sus intereses”. Ello, de acuerdo con la Patria potestad responsable vs. la propensión de infantes y adolescentes a imitar no siempre las mejores actitudes (22).
V. Considero una inexactitud el eslogan “Todos los derechos para todas las familias”, cuando se obvia el poliamor; al tiempo que me pronuncio en favor de explicitar el artículo 45 de la Constitución de la República de Cuba en línea con el 29 de la Declaración Universal de DDHH (23) —sobre los límites: no otorgarle derecho a un segmento poblacional en detrimento de otro.
VI. Considero de utilidad extrema aplaudir tanto a especialistas con pesquisas de vanguardia en Psicología, Sociología, Pedagogía y Derecho, como a entendidos/as que también exhiben investigaciones de punta en Biología, Filosofía, Politología y Etnología —la última, con el sabio Fernando Ortiz (24). Es este un modo de legitimar el sistema categorial presente en este Proyecto, sobre todo en la percepción de género y sexualidad.
Concluyo: significo que —al paso que aprendamos y aprehendamos de “El ejercicio de la crítica” firmado por la Catedrática Graziella Pogolotti (25)— un Magisterio acerca de cómo abordar problemas peliagudos para la educación desde la perspectiva familias-institución escolar se encuentra en el Proyecto del Código de las Familias ante la serie televisiva Calendario que “no está hecha solo para criticar, sino también para ofrecer posibles soluciones” —sin obviar las seis consideraciones resaltadas. Ojalá que madres, padres, el Ministerio de Educación, organizaciones estudiantiles y decisores se conviertan en depositarios de este asunto. ¡Amén!
Referencias:
1.- https://cubainformacion.tv/la-columna/20210203/89887/89887-cuba-el-pulso-en-el-2021-1.
10.- https://www.cubainformacion.tv/la-columna/20211230/94996/94996-cuba-el-pulso-en-el-2021-14-y-final.
11.- https://www.minjus.gob.cu/sites/default/files/archivos/publicacion/2022-01/goc-2022-ex4.pdf.
12.- https://www.cubainformacion.tv/la-columna/20211004/93506/93506-cuba-diaz-canel-revolucion-6.
16.- https://cubainformacion.tv/la-columna/20200224/84812/84812-cuba-diaz-canel-revolucion-4.
17.- https://cubainformacion.tv/la-columna/20200825/87576/87576-cuba-diaz-canel-revolucion-5.
19.- http://www.granma.cu/cuba/2019-01-05/en-pdf-nueva-constitucion-de-la-republica-de-cuba.
22.- https://lamenteesmaravillosa.com/por-que-los-ninos-imitan-a-los-adultos/.
23.- http://www.un.org/es/universal-declaration-human-rights/.
24.- http://www.perfiles.cult.cu/articulos/factores_cubanidad.pdf.
25.- https://www.juventudrebelde.cu/opinion/2022-02-05/el-ejercicio-de-la-critica.
